viernes, 9 de enero de 2015

Vagabundo - 10

Hola a todos *-* lamento tardar en exceso x_x pero no quiero dejar este fic sin un final, así que espero les guste. Saludos y muchos abrazos.
Inmediatamente Bill se vistió y se ocultó en los arbustos. Podía escuchar a su madre hablar tantas cosas. No había medido ninguna consecuencia, no había imaginado que algo así podría ocurrir y ahora no sabía qué hacer, solo ocultarse, ver la forma de escapar.

—Hablaré con ellos —le dijo Tom al ver su cara de susto, se habían ocultado agachándose, pero podían oír que buscaban a Bill, Simone no dejaba de gritar buscando a su hijo.

—¡Bill, Bill…! ¡Si alguien lo tiene, suéltelo! 

Bill se angustió más porque podía darse cuenta que su mamá sabía que estaba con alguien y fue cuando Tom se puso en pie que Simone gritó y la policía junto con Andreas corrieron hacia él.

—Estamos buscando al hijo de la señora, ¿usted sabe dónde está? —preguntó un efectivo policial y Simone lo miró asustada, para ella Tom era un vagabundo peligroso.

—¡Dime dónde está mi hijo! —gritó queriendo ir donde él, pero Andreas la detuvo.

Bill no podía aguantar más y se puso de pie al lado de Tom, se abrazó de su brazo y miró a su mamá con angustia. —Mamá, estoy bien —dijo no separándose de Tom.

Los policías vieron la escena y preguntaron la edad de Bill, Simone les dijo que era mayor de edad y no preguntaron más, se fueron a pesar de que Simone quiso detenerlos, para ellos estaba claro, era un encuentro de novios, no un secuestro o que le estuvieran haciendo algún daño.

Fue cuando Bill miró con mucha decepción a su amigo rubio. —No puedo creer que fuiste capaz de alarmar a mi mamá.

—¡Bill, explícame! —gritó Simone acercándose con temor—. Suelta a ese hombre, no ves que es… es… —no quería decirlo.

—Me llamo Tom, señora y su hijo me importa mucho.

—¡Cállate! —gritó Simone.

—¡Ja! Un vagabundo como tú no debería fijarse en un hijo de familia como Bill —dijo Andreas y Bill se ofuscó.

—Mamá, me quedaré con Tom, es la pareja que escogí, lo amo…

—¡Bill! —su madre derramaba lágrimas de frustración y a Bill logró perturbarle—. ¡Mientras vivas en mi casa no permitiré que te hagas daño de esta manera!

Simone gritaba, estaba indignada y Bill cada vez más sentía que no podía defender su relación. Tom por más que quería hablar, era interrumpido u ofendido por Andreas y Simone. Al final, luego de una extensa discusión acalorada, Bill era jalado por su mamá hacia la casa. 

Andreas y Tom se quedaron mirándose con odio. —Recuperaré a Bill, no permitiré que arruine su vida contigo, si dices quererlo tan siquiera un poco, debes saber que le haces daño, jamás podrás darle una vida digna, él se merece lo mejor y tú no entras en ese concepto, solo eres un vago, capaz y hasta drogadicto, comerciante, delincuente…

—No renunciaré a Bill —fue lo único que pudo decirle, porque él tampoco podía explicar su condición.

Tom vio como Bill se iba llorando y no pudo hacer nada, debía regresar antes de que se sienta perdido, debía armar un plan.

Nunca antes, que pudiera recordar, sintió que valía la pena vivir un día más, nunca antes se había sentido así de vivo y especial; entonces se dio cuenta de que Bill era la razón, el motor que le impulsaba a hacerlo, a sentirse vivo. Era un buen motivo de lucha, luchar por su amor, demostrarles a su familia y amigos que él no era un peligro, no era un simple vagabundo, ¿pero cómo lo haría?

Tuvo que regresar donde Bushido, a su pequeña habitación temporal.

—Luces mal, amigo, ¿pasó algo? —preguntó Bushido a lo que Tom lo vio y asintió.

—Sí, creo que me cansé.

—¿Cansarte? ¿Pero de qué? —Tom le dio la espalda.

—De no ser alguien, de no poder ser alguien para Bill. De ser nada.

—Bueno, no sé, pero tú siempre pareces ocultar quién eres.

—Es que no sé quién soy.

—No es cierto. Algo pasó, Tom, tú lo sabes, toda persona tiene un pasado. —Tom se molestó y le dio la cara.

—Tú dices todos, pero no me metas en el mismo saco, no sé quién soy y quiero ser alguien, lo que pasa es que no sé cómo, no sé cómo demostrarle a la familia de Bill que no tengo malas intenciones para con él… pero mi imagen creo no dice que soy de confianza. 

—Necesitas encontrar tu pasado, Tom, tú sabes a lo que me refiero. —Tom lo miró y otra vez sintió el dolor de cabeza.

—No es así de fácil como lo dices, esto no es nada fácil. 

Y no era nada fácil, por más que lo negara, él sabía que había un pasado, uno pasado que cada vez quería salir de su cabeza y hacerle ver todo.

*

Bill tenía la típica reunión con sus padres, en su habitación, con ellos sentados en dos sillas al frente suyo. Ya antes había experimentado algo similar cuando tenía doce años y se había perdido, su padre le había hablado de los peligros de confiar en gente extraña y Simone también había hecho todo un escándalo… Pero esta vez era un poco diferente, Bill no se quedaría callado escuchando todos los sermones, sus padres sabían que a él le gustaban los hombres, solo faltaba hablarles de Tom, aunque su mamá estaba bastante horrorizada.

—… es el colmo, tu hijo estuvo a orillas del río con un vagabundo, un hombre de esos que están pasando la reja. —decía su madre bastante alterada, su padre estaba escuchándola con indignación y no sabía qué decir.

—¿Tienes algo qué explicar? —le preguntó y los labios de Bill temblaron por las ganas de llorar.

—Es Tom, es mi novio, nos queremos…

—¡Pero es un vagabundo! —Gritó Simone.

—¡Es un hombre de bien, tiene una casa, no es un vagabundo!

—¿De qué familia es? ¿En qué trabaja? ¿Qué ha estudiado? ¿Conoces a sus padres? ¡No ha venido a pedir permiso para salir contigo! —gritó su padre.

—Eso eran otros tiempos… —dijo Bill bajando la cabeza, habían lágrimas que salían de sus ojos, no soportaba que le gritaran de esa manera, no sabía qué más decir para que sus padres entiendan quién era Tom para él, que dejaran de ver su apariencia para juzgarlo—. Lo amo, Tom no es mala persona.

—Te hice muchas preguntas. —Bill alzó la vista y miró a su padre.

—No sé quiénes son sus familias, no sé si ha estudiado o no, no sé nada de su pasado, solo su presente y me agrada, me gusta, lo quiero mucho.

—¡Qué horror! —gritó Simone—. Nuestro único hijo a quien hemos cuidado bien, nos hemos matado año tras año para darle lo mejor, y ahora nos sale con algo así, a punto de arruinar su vida, poner el peligro su vida por enamorarse de un mendigo, ¿acaso no te das cuenta? 

—De lo único que me doy cuenta es que nunca antes me había sentido así, nunca antes me sentí tan vivo, tan querido… —bajó la cabeza—. No quiero perderlo, no… Tom es especial y si ustedes no entienden a lo que me refiero entonces… —calló por un momento, la idea le parecía aterradora—. Entonces no me quedará otra que… que… irme. 

Sus padres se horrorizaron aún más, sin embargo, podían darse cuenta de que hagan lo que hagan, Bill estaba enamorado y decidido a luchar por sus sentimientos.

Luego de una acalorada discusión, Bill peleó con sus padres y sus intentos de encerrarlo en el cuarto… pero no pudo salir, se quedó encerrado y le dio un ataque de asma que logró calmar con su inhalador.

Sentado en su cama, no podía pensar en otra cosa que en Tom… en querer regresar a sus brazos, en estar con él a como dé lugar. 

Entonces vio su ventana, quizá si no podía salir por su puerta, al menos había otro lugar por donde salir, así que miró su armario donde tenía una pequeña maleta la cual la empezó a llenar de algunas cosas.

Se puso a pensar en si hacía bien, si valía o no la pena arriesgar tanto, su familia, sus estudios, sus amistades… frunció el ceño pensando en Andreas y revisó su celular que estaba en mudo viendo muchas llamadas perdidas de su parte, se molestó, pensó que en esa amistad ya no tenía solución pues lo que había hecho Andreas lo había perjudicado mucho.

Suspiró cuando tuvo sus cosas listas y se sentó en su cama, no sabía si debía hacerlo, pero sentía en su corazón que amaba a Tom y no podía estar lejos de él y si su familia sería un impedimento, entonces mejor irse…

Ya era de noche y no había llegado a ningún acuerdo con sus padres, solo el castigo de encerrarlo en su habitación hasta nuevo aviso, pues Bill no estaba dispuesto a esperar más. 

Caminó hacia su ventana y la abrió, abajo estaba parte del jardín, sería peligroso bajar así no más, pero tomaría riesgos con tal de salir. Pasada casi media hora, se deslizaba por una cuerda de tela de sus sábanas hasta que sus pies llegaron al suelo donde yacía su maleta que antes había lanzado y luego simplemente pasó la cerca y caminó hacia la zona peligrosa.

Comenzó a agitarse por el atrevimiento y tuvo que detenerse cerca a la reja para tomar aire y evitar que le diera un ataque de asma. Era de noche, hacía frío, estaba todo oscuro y era consciente de que era muy peligroso atreverse a entrar, solo esperaba encontrar a Tom, solo eso, que fuera él quien lo encontrara primero y le hiciera cruzar la reja y luego ir por debajo del puente.

Inhaló los químicos de su inhalador para relajarse y luego de tranquilizarse, alzó la maleta otra vez, se acomodó la gorra que traía puesto y cruzó la reja.

No había nadie a la vista, eran casi las diez de la noche y nadie en su sano juicio se atrevería a ir hacia ese lugar, ni siquiera los lugareños de la zona pues era sabido que en las noches se llenaban de delincuentes, traficantes de drogas de otros sitios y buscaban líos. La policía estaba harta de las quejas, así que esa zona se había vuelto tierra de nadie.

Con piernas temblorosas entró hasta pasar el túnel, sus zapatillas de tela se mojaron pues casi no podía distinguir por dónde pisar, todo era charco y no olía nada agradable, pero aun así prosiguió. 

No supo cómo, pero caminó tan rápido sin importarle algunas personas que se le acercaron a los cuales les dijo que buscaba a Tom o a Bushido y le dejaron pasar, seguido, un grupo de mujeres en trajes pequeños lograron perturbarle rozando sus cuerpos por donde podían, comenzó a agitarse hasta que vio el edificio mal pintado y a oscuras donde sabía que estaba Tom y corrió sin detenerse hasta entrar en él y correr por el pasillo mal oliente hacia la última puerta donde tocó con desesperación.

Tom intentaba dormir, había apagado el lamparín de cera que tenía en su habitación y se tapaba con la única manta que tenía, pero cuando estuvo a punto de dormir, escuchó que llamaban a su puerta.

—¡Tom! —y luego escuchó esa vocesita especial que había aprendido a amar… 

No podía creerlo, abrió la puerta y Bill soltó la maleta que tenía en una mano y fue con Tom, lo abrazó emocionado en la oscuridad—. Necesitaba venir, necesitaba verte y decirte que no quiero que me separen de ti, te amo Tom, te amo… —decía un agitado Bill y Tom correspondió a su abrazo.

—Bill… pero ¿y tus padres? —Bill se separó y lo miró a los ojos.

—Quiero vivir contigo, no me importa donde, pero mis padres no lo entenderán… —La angustia con la que lo miraba logró conmoverlo.

Tom tomó una de sus manos y lo jaló no sin antes cargar la maleta. Le hizo sentar en su cama mientras buscaba encender el lamparín otra vez.

—No sé si sea buena idea, vivo en las peores condiciones, acá estarás en peligro, voy a ayudarte a regresar.

—No Tom, no deseo regresar, me quiero quedar contigo. —Tom le dio la cara, se sentó a su lado, acarició su mano y le sonrió.

—No hay nada más que quiero que estar contigo, pero tampoco quiero ponerte en peligro, además ¿cómo harás para ir a la escuela? No me sentiré bien si decides faltar. —Bill bajó la cabeza, tampoco había pensado en eso.

—Pues no tengo salida, Tom, mis padres intentarán separarnos, no creo poder con eso. No sabes todo lo que sufrí de pequeño pensándote, creyendo imposible esto como para dejarlo pasar, además soy mayor de edad, la escuela está por terminar, que falte algunos días hasta estabilizarme no me será problema, enserio. —Tom lo miró comprensivo y apretó los labios pensando.

—Está bien —dijo resignado aunque por dentro emocionado y luego Bill se le lanzó a los brazos haciendo que Tom cayera de espaldas a su cama y Bill le besó—. Pero Bill, espera… —Bill se detuvo y lo vio a los ojos—. Hay algo que debes saber antes de todo… quizá no te guste lo que te diré, pero es necesario.

—Dime… —dijo con pequeña voz, sentándose otra vez a su lado.

—Yo… —Tom no sabía cómo explicarle, era todo confuso en su mente, pero sabía que si no le advertía algo a Bill no estaría tranquilo—. Algo me pasa. —Miró la reacción de Bill, éste no estaba ni sorprendido ni nada.

—Lo sé. —Es más, sabía que algo le pasaba. 

—Bien, sé que algo pasa, pero no sé qué tan grave puede ser. Creo que no pasaba ya que no buscaba emociones, es decir, solo vivía o ni era consciente de eso, hasta que llegaste tú y cambiaste mi mundo. Ahora pienso y siento que hay mucho por qué vivir y luchar, pero también con eso han llegado pensamientos y… y recuerdos de… de mi pasado… —Bill abrió los ojos, eso le sorprendió y sintió mucha curiosidad.

—Creo que deberías pensar en tenerme confianza.

—Quizá lo que diga te haga alejarte de mí… —Bill se angustió más, pero lejos de alejarse, tomó el rostro de Tom en sus manos.

—Creo tener derecho de saberlo. —Tom tragó saliva.

—Pues… yo… yo… tengo familia. —Bill palideció, no se esperaba algo así.

—¿Cómo?

—Tengo familia… tengo personas… hay personas en mi pasado, tengo una mujer y una niña en alguna parte del mundo. —Bill lo soltó y retrocedió en la cama. Miró hacia el frente y se lo imaginó.

Entonces parte de su ilusión decayó, no se lo esperaba ni un poco.

Tampoco Tom.


Sé que algunas palidecieron con lo que dijo Tom... pero su mente empieza a revelarle cosas que quizá mejor no se hubiera puesto a pensar... Tom tiene un pasado y la forma en cómo regresará quizá no sea la mejor. Veremos. ¿Comentarios *-*?

11 comentarios:

  1. Tmb intenté rebelarme contra mi hija, todos los papás creemos estar haciendo lo mejor para ellos, hasta que cedí y hasta ahora a veces nuevamente lo pienso y tmb pienso que debe aprender cometiendo sus propios aciertos y errores en su vida... Es arriesgado lo hecho por Billy para estar con Tom, su amado vagabundo *.* Él ha comenzado a quererlo pero su pasado, apareciendo en forma de flashes en du mente, hará peligrar la relación??? :( D: P.D. ah! Y ODIO CON TODO MI SER A ANDREAS!!! Actuliza prontito DamitaRosa Cuidate y besitos!!! :) ♥

    ResponderEliminar
  2. Valla eso si lo pensé con los capítulos anteriores, pero espero que pronto pueda recordar todo el panorama, porque así deja con la duda y la ansiedad de saber mas... Y a Andreas que le caiga un piano encima, sólo eso diré de él.

    ResponderEliminar
  3. Bill dejo su casa para ir tras Tom y ahora sabe que en algun lugar del mundo este tiene una esposa e hija, aunque no las recuerda bien. ¿Què hara Bill ahora? con la poca pero importante informacion que Tom, le ha dado de su pasado.
    Espero el proximo, saludos c:
    Ps: habra pronto actualizacion de Minino?

    ResponderEliminar
  4. Este es el ultimo capitulo?

    ResponderEliminar
  5. Huuuu se qyedo corto haa me gusto gracias pink eres genial haaa pobre Bill Tom con familia nooooo no me lo imagino

    ResponderEliminar
  6. Diorrr :$ ¿por qué? No quiero que aparezca el pasado de Tom....bueno si, pero lo de la esposa y la hija no xD.....bueno gracias por la historia, continua pronto por favorcito <3. :D
    -Sailly.

    ResponderEliminar
  7. Que lindo arranque de amor de Bill hacia Tom... <3 dejar todo por amor, es hermoso!! Gracias por todas tus historias. Siempre que leo una de tus historias haces que me emocione ;3 Espero que subas pronto!! Porfis!
    -Dani :D

    Pd- No queria que Tom tenga una hija u.u pero igual me sigue gustando la historia :P

    ResponderEliminar
  8. acabo de terminar d leer vagabundo y me encanto!!!! espero y puedas actualizar pronto y t venga un chispazo de inspiracion para vagabundo, minino y adultez..... !!!!!! mas para vagabundo jajajajjajajajaja

    ResponderEliminar
  9. Ohh!! Rayos!! en verdad me encantó el fic!! espero puedas actualizarlo pronto!! xq es un crimen que nos dejes así tanto tiempooo!! C=

    ResponderEliminar