Póster - 6

Siguiendo con las actualizaciones de este largo fic, les dejo otro mini capítulo. Besitos<3

Tom volvió a llamar y esta vez nadie respondió. 

—¿Estará duchándose? Oh, Dios mío, Bill Kaulitz en mi baño, espero todo esté en orden allá. —Se mordió el labio fuertemente, no podía concentrarse y la máquina que estaba manejando para cortar grandes trozos de madera para hacer muebles sonó estruendosamente, había un error. 

—¡Joder! ¿Quién está cortando mal la madera, las máquinas no se equivocan, es error humano! —gritó su jefe que había escuchado la máquina sonar. 

—Ya va, ya va —decía Tom poniéndose los lentes protectores de madera para solucionar el problema. Miró su reloj y sonrió emocionado, una hora más y estaba fuera. 

Su trabajo era una mierda, supervisar máquinas cortadoras de madera, todo era tan automático pero le pagaban un buen dinero con el que pensaba estudiar alguna cosa cuando se decidiera. 

Apenas tenía diecinueve años y aún no encontraba su camino. 

Sonó la alarma de salida y casi corrió a vestidores a ponerse su habitual ropa ancha. Usaban uniformes plomos para trabajar con la madera. 

Salió sin despedirse y tomó el tren tan rápido, debía verlo, saber cómo estaba y esta vez llevarlo a casa. Aún no veía las noticias que decían sobre su desaparición, estaba curioso por verlas en internet. Pero antes le ofrecería a Bill llevarlo a casa. 

Llegó a su departamento y entró apresurado. 

Algodones rosados - III

Hola a todos, subo el final del minific, espero se entienda el pequeño mensaje que tiene. Saludos a todos y gracias por leer. Besos<3

—Quiero verte… —dijo Tom recostado en la cama frente a Bill, extrañaba ver su desnudez y tocarlo íntimamente, aunque sabía que en lo último no se dejaría. 

—No. —Bajó la mirada y se encogió esperando escuchar a Tom bufar molesto, pero no escuchó nada y al alzar la vista Tom le sonrió. 

—¿Quieres una nube rosada de esas? —Bill sonrió mostrando sus dientes y rió. 

—Tom, me comí dos de esas en la mañana… no quiero nada. 

—De acuerdo. —Siempre tan complaciente, cumpliendo todos sus deseos, cada uno de ellos, su voluntad de no ser visto, ni visitado. Tenía el mejor novio del mundo y por eso no quería decepcionarlo con sus cambios extraños—. ¿Pasa algo? Te noto… no sé, mejor me callo. —Bill sonrió apenas y suspiró. 

—Quieres ver mi cuerpo y tengo miedo que… que te dé asco. —Tom se sentó en la cama mirándolo desde arriba, estaba indignado. 

—¿Cómo puedes pensar eso? El hecho de que estés embarazado no me da asco, ni el vientre que tienes, ni tu particular anatomía; te amo así, deja de pensar por mí, yo sé muy bien lo que siento y te amo. —Bill se puso serio y tomó el borde de su ancha camiseta blanca para subirla poco a poco viendo como los ojos de Tom se ponían expectantes, solo una vez en seis meses lo había visto desnudo y tocado, respetaba que Bill no quisiera más intimidad así que el simple hecho de ver su piel desnuda lo excitaba y llenaba de emoción. 

—Creo que no te gustará ver esto… —Terminó por alzarse la camiseta hasta las axilas descubriendo su pecho y vientre. Las aureolas de sus pezones estaban ligeramente más grandes que la primera vez que lo vio, mas Tom no miró ese hecho con descontento, todo lo contrario. 

Niñerías - X

Hola a todos *-* les traigo un nuevo capítulo de este fic que aún no sé cuántos capítulos más tendrá, veremos :D gracias por sus comentarios y por los ánimos, lo valoro.

Estaba a clases y tenía unas ojeras que no pasaban desapercibidas por Nicole. —Oye Bill, ¿te trasnochaste? No luces bien. —Él le sonrió y asintió—. ¿Sales con alguien? —preguntó triste y Bill se puso serio. 

—No —dijo, pero la mirada de Nicole llamó su atención—. Hum, lamento aún no poder salir contigo. 

—Ya no me quieres como antes, ¿verdad? —Bill tragó saliva. 

Hace un año más o menos, ellos tenían una pequeña relación que no pasaba de salidas al cine y pequeños besos, pero Bill le pidió tiempo, no se sentía seguro y además los problemas en casa habían aumentado. Quería que Nicole sea su amiga pero no algo más que eso. Sin embargo, con el paso del tiempo había notado que ella seguía esperanzada en él y en sí no lo había visto malo hasta que se dio cuenta que seguía esperando algo que no volvería a pasar, más ahora que Bill pensaba en Tom aunque no estuviera de acuerdo con eso. 

—Te quiero como amiga, no puedo más que eso —dijo con débil voz, temía causarle daño. La chica de cabello negro se encogió un poco en su asiento, aún no entraba el siguiente profesor y conversaban un poco. 

—Entonces quizá por las puras estoy queriendo acompañarte en la universidad. 

—Nicole, no hagas nada por mí, no mereces esperar a alguien así, lo siento pero quiero que seas feliz y a mi lado no lo serás. —Nicole le dio la espalda regresando la vista al frente pues un profesor entraba y Bill suspiró un poco nervioso. Él la quería sí, pero sabía que no estaba preparado para una relación seria. 

«Tampoco para estar con el pesado de Tom», pensó queriendo tener eso muy en claro. 

—Guarden todo y saquen sus lapiceros, pasaré a darles la prueba. —El estómago de Bill se contrajo en angustia, el examen para lo cual debía estudiar a las cuatro de la mañana empezaría y en realidad no había estudiado porque luego tuvo que bañarse y le volvió a dar sueño durmiendo hasta las siete. 

Pagaría las consecuencias de su mal sueño. 

Póster - 5

Siguiendo con las actualizaciones, un capítulo más de Póster. Besitos.

Llegó la hora de la merienda de las doce y Tom no pudo evitar llamar a su propia casa a ver si Bill le contestaría, tenía más noticias de él. 

Resulta que en su casa, una mansión en una zona residencial de Hamburgo, Georg, uno de los integrantes de la banda, había reportado que Bill había desaparecido de su habitación cuando se fue a dormir, no había forma de salir de ahí sin que alguien lo viera, eso era muy extraño. Toda la disquera y su familia no podían explicar dónde se pudiera encontrar el cantante y habían dicho que nadie había llamado o algo parecido como para sospechar de un secuestro. 

La música de Bill Kaulitz sonaba más en las radios ese día. Tom estaba un tanto apenado por la familia de Bill, debía regresarlo a su casa, reportarlo a las autoridades que de inmediato lo llevaría a su mansión, pero Bill no le contestaba el teléfono, ¿seguiría durmiendo? 

En la habitación de Tom Bill se lamentaba, dormía boca abajo y el teléfono sonaba a su lado sobre la mesita de noche. 

—¡Joder! ¡Quién puede estar llamando tanto! —Se removió fastidiado y con el cabello revoloteado alzó el auricular—. ¿Aló? 

—Hola Bill —respondió Tom agitado—. Soy Tom. —Los ojos de Bill se abrieron mucho recordando dónde estaba y quién era Tom. 

—Hola… 

—Hola —rió como un niño—. Sabes, hay noticias tuyas en la radio, te están buscando. —Bill se llevó una mano al pecho sintiéndose extraño, ¿qué sería de él teniendo que declarar a la prensa que simplemente había aparecido en la habitación de un chico? ¿Qué sería explicar eso a sus familiares que ni él mismo recordaba quiénes eran?— ¿Bill? —llamó por el silencio. 

—Ah, ¿tardarás mucho? —Tom suspiró ante eso, no preguntó por regresar ni nada parecido, preguntó por él. 

—Estaré en la noche, cerca de las nueve lamentablemente, pero te estaré llamando, puedes entrar a la cocina y prepararte algo… oh no, debo colgar —advirtió al ver a su jefe entrar al comedor y verlo usar el teléfono de la empresa. 

Algodones rosados II

Hola a todos, siguiendo el curso de este minific, les dejo el penúltimo capítulo. Gracias por leer~

Bill lloraba bañándose en la ducha. Lo había arruinado, todo había salido tan perfecto la primera vez que lo sintió íntimamente, todo parecía encajar tan bien, pero lo segundo que había pasado no, solo le constató más que era un fenómeno. 

—Bill, hijo, ¿estás bien? —preguntó su madre Simone desde la puerta del baño. Bill aclaró su garganta. 

—Sí… 

Saliendo de la ducha, cubierto casi todo el cuerpo por la toalla caminaba rumbo a su habitación un tanto compungido. Su madre lo vio desde el fondo del pasillo y suspiró al vacío. 

Pasados los minutos, entró en la habitación de Bill. 

—Mamá, me asustaste —dijo sentado en la cama ya vestido. 

—Lo siento. Hijo, debemos de hablar. 

—Si es de lo mismo, no quiero. —Ella quiso ser un poco más persistente. 

—Hablé con tu padre y bueno, es necesario ver a un especialista, ha pasado tanto tiempo que… 

—¡No! Es mi vida, es mi cuerpo, no quiero que nadie me vea otra vez. Mamá, solo quiero ser normal, por favor. 

—Estás saliendo con un hombre, ¿qué de normal tiene eso? —Bill se sonrojó, no sabía cómo su mamá se había enterado. 

Bill no quiso replicar, Simone se cansó de insistirle ver a un médico. Salió del cuarto dando un portazo y Bill se recostó en la cama mirando el techo de su habitación rosa... Al principio todo su cuarto lo era, él decidió cambiar eso, él no era una niña, lo supo desde siempre. Suspiró haciéndose una bolita y su celular volvió a sonar, sabía que era Tom, mas la vergüenza de no saber qué decirle en esos momentos impidió que contestara. 

Polizón - V

Hola a todos, siguiendo con este fic dejo otro capítulo más. Pongo un regalo que me lo dio Tiffany TwcLover Muchas gracias a ella por tan lindo presente *-*

Tom despertó primero y aún no amanecía. Despertó porque había un peso en su pecho que no le dejaba respirar bien, era la cabeza de Bill quien dormía plácidamente sobre él. Estiró una mano tomando sus cabellos negros en ella, peinándolo con sus dedos, aquel chico seguía durmiendo y de vez en cuando se movía y suspiraba acomodándose más sobre él, Tom sonrió ante eso, hace tanto que no tenía una compañía así de cercana, se puso a pensar si realmente había tenido a alguien así, durmiendo en su pecho al cual le haya confesado sentimientos aunque no hayan sido con palabras más intensas. Pues no, él no tuvo tiempo para enamorarse. 

Hacía un año, en el barco, subió una familia algo refinada. Él seguía con el trabajo agotador de siempre. Pero una tarde, la hija refinada de esta familia se le acercó mientras él limpiaba los botes salvavidas. Ella parecía interesada así que luego de algunos días terminaron encamándose en un cuarto del almacén. Aquello para Tom había sido especial, esa jovencita no era una prostituta con las que solía pasar en América cuando tenía día libre lejos del mar, la jovencita era de familia, quién sabe y él pudo haber iniciado una con ella si otras hubieran sido las circunstancias. Pero el padre de ella se la llevaba a América para hacerla casar, su hija de apenas dieciocho tenía un partido esperándola allá y Tom no tenía ni dónde caerse muerto, simplemente dejó pasar el tiempo. Un día aquella jovencita le regaló una hermosa muñeca de porcelana, con rizos rubios como ella tenía y le dijo que eso era para que la recordara por siempre… Tom se la recibió con una sonrisa y aunque él no tenía nada para darle, simplemente le sonrió, por fuera aparentaba estar bien, pero cuando el barco llegó a Boston, la vio irse junto a sus padres, se despidió con la mano mientras bajaba de aquel barco. Tom le sonrió solo hasta cuando ella dejó de verlo, después de eso juró nunca más ligarse a alguien sabiendo que se iría. Tomó la muñeca y la metió en una caja junto a cartas de su mamá en Inglaterra. Él no sacaría nada de ese armario, y así fue. 

Y ahora tenía a este jovencito hermoso que prácticamente dependía de él, ¿qué debía hacer? Ayer por la noche le había confesado que le gustaba, Tom no pensó que aquel pequeño le correspondería, se supone que debía rechazarlo y discutir un poco, pero no lo hizo, ahora lo tenía ahí pegado más y cada que quería empujarlo un poco el pequeño gimoteaba acomodándose mejor. Tom dejó de querer librarse, lo abrazó y le sobó la espalda. 

Sus ojos se cerraban otra vez, pero los rayos de la mañana entraban por la ventana sobre su puerta, debía despertar. 

Bill abrió los ojos y al percatarse que estaba recostado casi sobre Tom reaccionó rápido, recostándose a su lado, musitando un inaudible “lo siento”. 

Póster - 4

Hola a todos *-* les traigo otro pequeño capítulo más. Los quiero<3

Tom hablaba rápido, dándole toda una explicación de su propia vida. Bill solo miraba fijamente la pantalla, era él, se veía cantar con mucha energía en los videos que le mostraba. 

—Aquí, wow… aquí fuiste increíble, mira, en la parte final de la canción ¡te lanzas al público! Me imagino que estaba ya preparado porque si hubiese sido un público normal no te hubieran soltado, ya sabes. —Bill se veía a él mismo caer de espaldas al público luego de una canción que curiosamente sí sabía—. ¿Recuerdas algo? 

—Es extraño, pero recuerdo la música, sé la letra, pero no recuerdo ese día, tampoco a la gente que estuvo conmigo, es… no sé, como si no lo hubiese vivido. —Suspiró algo triste no sabiendo qué haría con su vida. Tom por su lado, quería que se sintiera seguro. 

—Te ayudaré, juro que lo haré. Cuando veas a tu familia y amigos quizá recuerdes todo. —Bill lo miró y formó una pequeña sonrisa, otra vez el corazón de Tom latía acelerándose cada vez más. 

—Supongo que la ventaja de ser famoso es tener justamente fanáticos como tú, gracias por esto. 

—Es un placer, en serio, esto quizá sea lo mejor que me ha pasado en la vida. 

La pequeña sonrisa de Bill continuó en sus labios. 

Comenzaba a amanecer y Tom a lamentarse. Debía trabajar, no podía faltar a pesar de estar junto a Bill. 

El cantante bostezó y con confianza se recostó en el sofá, su sueño era un tanto anormal, casi ni pudo controlarlo, Tom lo observó por un momento, parecía un ángel durmiendo. 

—Bill… —Le picó el hombro queriendo despertarlo, no logrando su cometido—. Bill, debo ir a trabajar, no puedo dejarte… quizá deba hacerlo. 

Los minutos pasaban y Bill no despertaba, era incómodo dormir en el sofá así que Tom lo alzó en sus brazos para llevarlo a su recámara y dejarlo sobre su cama. 

Algodones rosados

Hola a todos, estaré subiendo este minific que consta de tres capítulos. Nació para la serie "Tokio Hotel a través de los colores" iniciada en el grupo de autores de fanfics, tocándome el color rosado por obvias razones XD Espero les guste.

Resumen: 

A Bill le gustaban los algodones de azúcar, Tom sabía eso. Lo que no sabía era que Bill escondía un secreto difícil de contar y lo que ambos no sabían era la forma en cómo eso saldría a la luz.

Rated: NC +18
Categorías: Slash 
Personajes: Bill, Tom, Original.
Advertencias: Incesto no relacionado, lemon, Mpreg (embarazo masculino), Muerte de un personaje.
Género: Romántico, Drama.
Pareja Principal: Bill - Tom

Notas de autor: Un poco confuso quizá. agradezco el banner a Mon, fue más de lo que esperaba *-*

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—No puedo creer que te gusten esos… algodones rosados —reclamaba Tom mientras Bill comía otro más de esos. 

—Se llaman algodones de azúcar, son deliciosos, humm… —Tom se quedó viéndolo una vez más, casi embelesado. 

Estaban en el parque, una de sus tantas citas, se habían conocido en el instituto de música, Bill estudiaba canto y Tom guitarra. 

Hace algunos meses Tom veía en Bill algo más que un amigo, se sentía atraído aunque ese tema lo incomoda un poco, el hecho de considerarse gay por sentir eso lo ponía en contradicciones contra él mismo. 

—Bill —llamó con temor y el chico sentado a su lado lo miró con el algodón de azúcar cerca de su pecho—, olvídalo. 

—Tom —se quejó. Hace días que quería decirle algo y luego de mirarlo por unos segundos desistía, Bill estaba cansado de eso. Tenía sus pequeñas sospechas pero esperaba que sea Tom quien lo dijera—. Otra vez el silencio, quiero saber qué intentas decirme. 

—Pues… Mira —señaló al cielo—. Nos persiguen, esas cosas rosadas nos persiguen a donde vamos. —Señaló el cielo con nubes extrañamente rosadas, el atardecer veraniego las había formado así. 

Una mano en su pierna casi hizo que se atragantase con el algodón. 

Póster - 3

n_n~ Disfruten el pequeño capitulo. Un abrazo grande.

Tom comenzó a vestirse, debía aprovechar la madrugada pues entraría a trabajar muy temprano entonces no podría ayudar a Bill. 

Bill le daba la espalda pues Tom se quitó el pijama un tanto avergonzado y se vistió con unos jeans anchos y una chaqueta deportiva también extra grande. Bill estaba bien vestido con la ropa que usó en la sesión de fotos para el póster, una polera de calavera, una chaqueta de cuero encima, unos jeans negros ajustados con correa platinada y unos zapatos un tanto altos; estaba maquillado y recientemente el brillo de sus labios producto del gloss ya no estaba intacto pues había sido besado por el sujeto misterioso dueño de esa habitación. Se tocó los labios algo incómodo. 

—Estoy listo —dijo Tom para que Bill pudiera voltearse. 

—Sabes, no sé cómo encontrarás mi casa, no sé donde vivo. 

—Quizá si vamos a una delegación policial o… —calló de repente al ver los ojos de Bill mirarlo fijamente, tragó saliva algo intimidado y sorprendido por su belleza real frente a sus ojos—. Quizá no quieres irte —soltó al vacío casi en un susurro comenzando a acercársele a lo que Bill retrocedió un poco. 

—Quiero irme, sí quiero irme. —Tom detuvo sus pasos y asintió. 

—De acuerdo, entonces vamos. 

Bill asintió y Tom abrió la puerta de su habitación, guió a Bill en medio de la oscuridad del pasillo y encendió la luz. El frío de la noche le azotó e hizo que se abrazara a sí mismo. 

—Tienes frío, espérame. —Corrió hacia su habitación en busca de un abrigo, uno grande que le cubriría hasta las rodillas prácticamente. Lo alcanzó en el pasillo y se lo extendió—. Ten esto, te servirá. 

Bill lo tomó como quien toma algo que no le gusta, no tenía estilo y era de color rojo con pequeños estampados negros, ¿quién usaría semejante atuendo? Solo Tom. 

—Hem, gracias. —Disimuló una sonrisa y se lo puso, Tom comenzó a ponerse algo ansioso, es que era Bill Kaulitz, ¿y si tenía hambre? ¿Y si quería usar el baño? ¿Y si tenía sueño? No le había ofrecido nada, que poca educación o escasa consideración de su parte. 

—Bill, si deseas algo, cualquier cosa, solo pídelo. —Bill se lo quedó mirando por un momento y pestañeaba seguido. 

—Quiero recordar quién soy, nada más eso. 

Polizón - IV

Hola a  todos, continuando con la publicación de este fic, traigo capítulo cuatro. Besitos *-*

Su primer beso, Bill no sabía que un beso se sentiría así de suave, así de cálido. 

Su cuerpo temblaba de miedo y por un momento sintió vergüenza, así que llevó sus manos hacia Tom para empujarlo un poco y romper con esa unión. Así fue, Tom se separó y Bill jadeó ante ello para luego cerrar su boca algo atemorizado, estaba totalmente ruborizado y aún mantenía sus manos en el pecho de Tom, arrugando su pijama. 

—Tom… —susurró sin verle, se encogió en la cama y lo soltó de golpe, juntado sus manos en su pecho, haciéndose una bolita. El mayor acarició su cabeza. 

—No temas, no te pongas así —decía con voz calmada. Bill suspiró intentando relajarse sin mucho éxito. 

—Me has besado. —Tom sonrió. 

—Dijiste que podía hacerlo, ¿lo recuerdas? En el almacén tú lo dijiste, que te dejarías besar —Bill recordó aquello y se mordió el labio. 

—No pensé que lo harías. —Tom se puso serio, mirándolo de cerca con la poca luz de su lamparín. 

—Lo haré muchas veces, será mejor que te acostumbres, es una condición. —Bill a pesar de todo asintió—. Ahora duerme. Mañana saldré muy temprano de aquí, te encerraré y deberás mantenerte callado. 

—Lo sé. —Tom extendió una mano y acarició su cabeza, Bill cerró los ojos sintiéndose confortable. 

—Ahora duerme, Bill. 

Póster - 2

hola a todos n_n les traigo otro pequeño capítulo de Póster. Besos <3 

Tom no sabía qué hacer, eso era algo sumamente desquiciado, quizá lo estaba, quizá de la noche a la mañana tenía esquizofrenia entonces veía a Bill ahí en su cama. 

Se puso a pensar en el estrés que tenía en su nuevo trabajo en una fábrica de muebles, le exigían tanto que casi no tenía tiempo para pensar en sí mismo, era una máquina más simplemente, se sentía inhumano, como un robot que sigue órdenes programadas para trabajar, entonces cuando llegaba a casa se sentía vacío, solo y se desesperaba. 

Esa no era vida. 

Así que había comprando el póster de su cantante favorito, aunque medio mundo le diría que eso era gay, poco le importó, algo de él quería tener. 

Haría lo que quería, al menos esa libertad tendría sin importarle lo que pensara el resto. 

Y ahora tenía ese particular problema. 

Se levantó de la cama y caminó hacia es póster pegado detrás de la puerta de su habitación, lo arrancó, era solo un cartón plastificado con unas letras negras que decían: “Bill Kaulitz”. 

—¿Qué es eso? —preguntó Bill con suma confusión. 

—Es… bueno, esto es un póster tuyo, mira. —Se lo mostró, Bill se levantó de la cama y caminó hacia él. Tom no pudo evitar ponerse frío, lucia real, cada parte de Bill parecía un ser humano real, no un espectro, ni un fantasma o una alucinación. 

—Eso no puede ser un póster, está vacío. 

—Justamente, de aquí saliste o eso creo. Espérame. —Se le ocurrió una idea, fue hacia la ventana y la abrió mirando si era de día o no, aún no lo era. Buscó su reloj sobre la mesa de noche, eran las dos de la madrugada. Su corazón latió más presuroso y miró a Bill—. Creo poder llevarte a casa, ¿dónde vives? 

—¿Yo? Bueno… —Frunció el ceño y comenzó a pensar, movía la cabeza confundido—. No me acuerdo, espera, debo concentrarme. Oh Dios, algo pasó con mi cabeza, no sé ni quién soy. 

—Eres un cantante, el mejor de todo Alemania, naciste un primero de setiembre de 1989 en Leipzig, tu madre se llama Simone Kaulitz, tienes el apellido de ella pues tu verdadero padre Jörg no quiso firmarte cuando naciste; tu mamá se casó otra vez con un hombre que se llama Gordon, es un guitarrista famoso y el que te llevó a la carrera musical. Si quieres saber algo más de ti, solo pregunta. —Bill lo miraba anonadado y algo temeroso, ¿quién era ese tipo que sabía todo de él? 

—¿Quién eres? 

Niñerías - IX

Hola a todos, terminé otro capítulo y decidí subirlo. Saludos a cada uno de ustedes y gracias por sus opiniones y comentarios, los valoro *-*

Bill temblaba mucho y pestañeaba confuso mientras Tom casi devoraba sus labios. Tenía saliva hasta por su barbilla y sentía que pronto se asfixiaría por el beso. Una mano de Tom apretó en su cintura y se metió por debajo de su camiseta a lo que Bill se removió y rompió el beso. El sonido que salió de sus labios fue un pequeño jadeo que excitó a Tom. 

—Déjame —susurró Bill y Tom se irguió apoyándose luego en la cama, dejando en el suelo a un Bill rojo de la vergüenza y agitado como pocas veces. 

—Te ves lindo así —dijo mirándolo desde la cama. Bill se tapó la cara con ambas manos, se sentía humillado y luego se puso en pie. 

Miró a Tom con el entrecejo fruncido, después llevó ambas de sus manos hacia su cuello y apretó un poco. Los ojos de Tom se abrieron sorprendidos, se asustó por esa reacción de quien creyó nunca haría algo semejante. 

—¡Voy a dejarte algo en claro! ¡No me gustan los hombres! —gritó Bill en el rostro del otro—. Estoy cansado que me trates como tratabas a las niñeras, no vine a eso aquí, ¿entiendes? —Bill lo soltó al ver que se ponía rojo y al hacer eso Tom comenzó a toser. 

—Eres fuerte, casi me matas. Oye, además a ti te gustó el beso, eso de que no te gustan los hombres diría que es falso. —Bill quiso volver a ahorcarlo pero Tom alzó ambas manos en señal de rendición—. Niñero… 

—¿Te gustan los hombres? —preguntó Bill ofuscado. 

—Quizá, me gusta todo lo que sea lindo y tú entras en esa definición. —La mirada de Tom era atrevida e hizo que el vientre de Bill se contrajera—. Ven aquí. —Extendió una mano—. ¿Por qué no pasamos un buen rato? Cierra la puerta con seguro y verás que la pasaremos bien. —Bill abrió la boca del asombro, no había conocido alguien más descarado que Tom—. Oh, vamos, sé que quieres… puedo complacerte. 

—Sabes qué, si quieres cenar tendrás que ir por tu cena. Me voy a casa. 

Póster - I

Hola a todos n_n~ como dije, iré subiendo de a pocos mis fics en mi blog. Este es un long fic que comenzó siendo un drabble para un concurso en el grupo de autores. La temática que nos pedían era fantasía y esto salió. Un abrazo.

Resumen: 

«Situación sentimental: Esperando que el póster salga de la pared.»

Oh, my God, salió...

Rated: NC +18
Categorías: Slash 
Personajes: Bill, Tom, Georg, David Jost, Original.
Advertencias: Incesto no relacionado, lemon.
Género: Fantasía, Romántico, humor.
Pareja Principal: Bill - Tom

Notas de autor: Drabble hecho fic y cuenta con 74 capítulos cortos. 

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Tom caminaba rumbo a su departamento mirando a todos lados y es que se sentía tan avergonzado de haber comprado un póster de Bill Kaulitz, un cantante muy famoso en Alemania preferido por las féminas. Se supone que para él debía pasar desapercibido, pero una vez que terminó de ver un vídeo clip se declaró fanático y había comprado un póster para pegarlo en la pared de su habitación. 

Lo puso detrás de su puerta para que solo él lo viese desde adentro. Se quedó mirando por algunos minutos, absorto de la belleza del chico misterioso. Suspiró cerrando sus ojos, si tan solo lo conociera en persona, siquiera una vez… Pero sus horarios de trabajo eran arduos que ni a un concierto podría asistir. 

Salió de la habitación, debía continuar con su vida. 

Trabajo, y más trabajo; una merienda a las doce y luego más trabajo. La vida parecía no merecer vivirla así. 

Regresó a casa muy cansado, entró a su habitación y fue directo a su cama a dormir. Al día siguiente debía trabajar. 

En plena oscuridad y entre sueños, logró sentir unas manos que le tocaban las mejillas. 

—Hey, tú, despierta —le insistía una suave voz. 

Pestañeó unas cuantas veces, ¿qué era eso? O mejor dicho, ¿quién era? 

Una corriente helada le recorrió el cuerpo y se despertó. Bill yacía sentado en su cama viéndolo. 

—¡Qué-é pa-pasa! —apenas dijo asombrado. 

Salió de su cama cayéndose al suelo. Bill le miraba extrañado. 

—Lo mismo pienso yo, ¿qué pasa contigo?, ¿dónde estoy? 

—Estás en mi habitación y… —Sus ojos se enfocaron en el póster extrañamente vacío. 

¡Cómo era eso posible! 

Regalo a "Como él" by lionessgirl2007

Hermoso regalo que nos mandó lionessgirl2007 a Aliss y a mí por nuestro oneshot "Como él" Te agradecemos infinitamente tan lindo gesto.

Los que han leído el oneshot sabrán del por qué de esta bella manip ;-)

Polizón - III

Hola a todos *-* les traigo capítulo tres.  pongo un regalo que me llegó de parte de Obed Gamez hace mucho tiempo, ¡es hermoso!

—No entiendo… ¿qué quiere? —preguntó el menor y Tom perdió la poca paciencia. Se puso en pie y avanzó hacia el otro quien se encogió un poco ante su rapidez. Le tomó del brazo y lo jaló a su cama—. Espere, me hace doler… 

—Shh… Será mejor que no grites, tranquilo. —Terminándolo de empujar Bill cayó en la cama con Tom yendo sobre él, entonces abrió los ojos de miedo dándose cuenta de las intenciones del otro. 

—¡Soy un hombre! —casi gritó colocando ambas manos en los brazos del otro quien se deleitaba mirando sus finas facciones ahora con más detenimiento. 

Que lindo le resultó verlo así, con la cara limpia y ese cabello negro intenso, los ojos brillantes, aunque asustados y esos labios carnositos y húmedos. Tom sintió como el otro intentaba levantarse. 

—Sé que eres un hombre, ahora escúchame bien. —Puso un dedo sobre sus labios, intentando calmarlo, pero el menor se desesperaba, se arqueaba y movía demasiado— ¡Quieto! —Tom no quería golpearlo, sabía que lo dañaría, pero usando su otra mano tomó las manos del otro y las aprisionó juntas sobre su cabeza, y le miró— Escúchame, ¿quién te dejó entrar al barco? Dime, y ¿quién te dio de comer? ¿Ah? Responde, polizón, ¿quién no te ha delatado y echado por la borda? ¿Sobre la cama de quién estás a punto de dormir? —Bill intentó tranquilizarse por un momento solo para pensar en todo aquello. 

Como él By Whisperof & Pink Girl

Hola a todos *-* Este oneshot nació gracias a que el grupo de autores organizó un evento al cual lo llamaron "Reto de a dos", bien, tuve el honor de escribir junto a Aliss R Alemán *-* y esto fue lo que salió. Espero les guste.

Resumen: 

Luego de un súbito episodio, ninguno pensó que sería como el otro, literalmente.

"Como una sombra, como un espejo, como él."

Autoras: Whisperof y Pink Girl
Rated: R +16
Categorías: Slash 
Personajes: Bill, Tom, Jörg, Simone, David Jost.
Advertencias: Incesto, lime.
Género: Fantasía, Romántico, Drama.
Pareja Principal: Bill - Tom

Notas de las autoras: 

-Aliss: Espero que les guste; la idea vino tras  un largo día después de ingerir grandes cantidades de jugo de fruta. Fue dulce y algo agria también, como la historia.

-Pink: Fue una experiencia muy agradable escribir con Aliss *-* la temática vino de ella y creo que demoramos poco en terminarlo.

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La distribución de los muebles y artefactos lucía perfectamente alineado pese a tener cuatro mascotas caminando de aquí para allá; uno de los enseres abrazaba ambos cuerpos que permanecían codo a codo, sin embargo, la conversación por móvil que uno de ellos mantenía comenzaba a tensarlos cada vez más, no por nada eran hermanos gemelos al compartir emociones en su invisible conexión. 

Uno oía el diálogo, el otro tensaba los nudillos de sus dedos. 

El día pudo ser como cualquier otro si el teléfono no hubiera sonado con ese nombre apareciendo intermitentemente; con el simple hecho de leer esas letras, provocaba muecas de disgusto a cualquiera de los dos. El reciente tatuaje del actual rubio parecía cambiar de forma y dimensión; empuñar su mano y enterrarse las uñas era lo que menos le importaba, él quería detener el problema ya. 

Tom se paró al frente de él, suspirando resignado y rechinando los dientes; odiaba ver a su hermano así, molesto y tan tenso. Con un golpe que su rodilla propició a la del gemelo, logró llamar su atención en silencio, indicándole que debía colgar ya esa llamada. Los ojos de Bill miraron los del otro, no obstante el rubio ignoró su pedido y continuó la conversación removiéndose en su asiento. El mueble ahora albergaba a un solo gemelo. 

Una vez dentro de la cocina no tuvo mejor idea que cortar por la mitad un par de maracuyás, haría un jugo, algo para que su “todo” apaciguara su ser. Lo que Tom más disfrutaba en el mundo era en serle útil, aunque él no se lo dijera jamás y menos de esa forma. Vertió la consistencia gelatinosa y aromática dentro de la licuadora pero se detuvo, Bill ya no hablaba más. 

—Tenemos que ir —dijo Bill en forma monótona desde el marco de la cocina. Su semblante demostraba malestar y ansiedad. 

Niñerías - VIII

Hola a todos <3 después de demorar un poco les traigo capítulo y se lo dedico a cada uno de las personas que me han apoyado cuando más lo necesitaba, no me esperaba tanto cariño y lo valoro mucho ¡Gracias! Y a Aliss <3 

Bill no dejaba de pensar en Tom y su pierna, esperaba que estuviera bien y se apresuraba en ir al trabajo. 

—Jovencito, debemos hablar —dijo su madre Simone. 

—Estoy tarde. 

—No podré decírtelo cuando llegues porque estaré descansado. 

—Dime, rápido. 

—Bien, este fin de semana deberás ir con tu padre. —Bill hizo una mueca de disgusto. 

—Trabajo los sábados y domingo es el único día que tengo para lavar mi ropa y alistar mis trabajos de la escuela. Ah, y además dije a Nicole que saldría con ella. 

—Tendrás que hacer tu tiempo y por la ropa no te preocupes, lo haré yo y la tarea de la escuela la podrás llevar a casa de tu padre. Debes ir, es orden del juez y puede pensar que estoy influenciándote para que no lo veas y sería perjudicial para mí. 

—Con que era eso… 

—Debes pedir permiso para mañana sábado. —Bill hizo una mueca, no quería. 

—¿Y si no me lo dan? No quiero perder el trabajo. 

—Deberán darte, es una orden del juez. —Bill no quería explicar ese detalle de su vida y se puso nervioso. 

Al ir al trabajo, la señora Dunja le esperaba no muy animosa. 

—Lo que pasó ayer no debe volver a pasar, ¿entendiste? Sé que mi hijo es un abusivo con las personas de servicio por eso no tenemos cocinera, todo lo compramos semi preparado, pero no debiste hacerle caso. 

—Lo siento señora, no quería causarle mal. 

—Pues le causaste uno, está internado ahora y bueno, en realidad es mejor así. —Bill bajó la cabeza, Tom no estaba en casa y con lo mucho que detestaba el hospital, le dolió que lo hayan mandado de vuelta. 

Liam se le acercó y abrazó, estaba contento de verlo otra vez y Bill tuvo que fingir una sonrisa. El pequeño le regaló una gorra que le había comprando en el supermercado. 

Blogs de interés

Esta entrada es solo para promocionar blogs que ayudan mucho al fandom Tokio Hotel.

Comencemos por el que ayuda a mejorar los fics. Este tipo de cosas son las que aportan en la mejora de la calidad de los escritos. Si te interesan los fics y deseas escribir o si los escribes y deseas mejorar, no olvides pasarte por el blog de Autores de Fanfics, creado para ayudar, orientar y dar consejos sobre cómo escribir mejor, además aporta al fandom de TH con conocimientos sobre terminologías relacionadas con fanfics, entrevistas a autores, concursos y muchas cosas más. Ah, y también puedes hacerte miembro de su grupo de facebook para todo aquel que escribe o le gustaría hacerlo.

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Otro blog que aporta al fandom es TwcKaulitz, este blog investiga hechos relacionados con los gemelos Kaulitz, desmienten rumores o los confirman y además de hacer análisis que aportan con conocimientos para todos los fans. Creas o no en el twincest, este blog te ayudará a conocer más a los Kaulitz.

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Espero les haya servido. Y si tienen sugerencias de otros sitios que aporten con algo al fandom, háganlo saber.

Masitas

Hola a todos *-*!! Después de tanto vuelvo a publicar este pequeño drabble. Creo que iré subiendo de a poco los fics que tengo. Gracias a cada uno por el apoyo, los consejos y las críticas constructivas. Los quiero <3

Resumen:

 Dos masitas creadas para estar juntas.

"No importa de qué estés hecho"

Rated: T (13+)
Categorías: Slash 
Personajes: Bill, Original, Tom
Advertencias: Incesto
Género: Fantasía, Romántico, Tragedia
Pareja Principal: Bill - Tom

Notas de la autora: Salió de una conversación con mi querida Aliss R Aleman cuando hablábamos de panes XD amé hacerlo aunque el final sea... hum, ya verán. Dedicado a ella <3

Banner hecho por Aliss R Aleman

En la puerta del horno se quema el pan. 

Es lo que dicen. 

En una peculiar panadería se realizaba un pequeño concurso de panecillos en formas humanoides llamadas guaguas. 

Geppeto Jost era un anciano panadero cuya trayectoria estaba finalizando por las industrias modernas que habían salido, su pequeña panadería estaba casi en la quiebra, pero se animó participar. 

Con sus manos curtidas hizo dos masitas dándole forma de bebés idénticos. 

—Algo le falta, ¡algo le falta! —Golpeaba la mesita en donde tenía todos sus ingredientes, la mezcla perfecta para la masa. 

Su nieta rondaba por ahí, una adolescente a la que él consideraba una niña y se le acercó cantando una canción. 

—Abuelito Geppeto, ¿por qué tan molesto? —Él la miró algo angustiado. 

—Esto es importante para mí, pero siempre he creado panes comunes, mi niña, esto no tiene forma. —Ella sonrió un poco viendo esas dos masitas y su mente comenzó a volar en crear miles de formas posibles. 

—Le falta amor… ¡Veo gemelos! —Una risita maliciosa salió de sus labios, pero el abuelo no la pudo descifrar. 

Ella comenzó a moldearlos a su manera, creando a dos de sus artistas favoritos: Bill y Tom Kaulitz. Luego los juntó para bañarlos en clara de huevo. El abuelo quedó complacido y los metió en una bandeja. 

—Ni idea de qué hayas hecho, pero a ver si gano o no. 

—¡Ganarás abuelo! 

A la Gordita Infeliz.

Esto no va dirigido a ninguno de mis lectores, ni amistades *-* Esto es para Gordita Infeliz, que desde ya algún tiempo ha ido publicando críticas en su Tumblr y en la mayoría de sus publicaciones son sobre mis fics. Así que a ella me dirijo.

Para ser una buena crítica hay que saber de lo que se critica y además saber hacerlo, careces de ambos.

Sé muy bien lo imperfecta que soy para escribir, además no soy escritora, solo autora de fics  y me gusta hacerlo. Tengo miles de errores, pero no me quedo ahí, me gusta aprender y no solo eso, sino también enseñar. En cambio tú lo único que haces es señalar la paja del ojo del otro y no ves el tremendo tronco que tienes en el tuyo.

Al principio creía que eras una crítica como las que saben, porque he sido criticada por varias personas anteriormente a las que he escuchado pese a la antipatía que les he tenido, pero como dije, me gusta aprender, así que todo lo que me enseñe a mejorar, lo aceptaré, como algunos de tus publicaciones a las cuales les doy la razón y otras simplemente no.

Tienes una extraña obsesión conmigo, por eso quiero decirte hazte ver, mujer. No estás bien, lo digo enserio, y además lo que me tienes es ENVIDIA porque a algunos les gusta mis imperfectos fics, y esto no solo aplica a mí, sino a las demás autoras que citas. Déjame adivinar, ¿eres alguna autora que escribió un fic que nadie hizo caso? Qué resentimiento el tuyo con la mala suerte, decides descargar tu frustración contra otros que sí, en realidad das más pena que todas mis fallas juntas.

No haces bien al fandom de Tokio Hotel, no buscas hacer bien, todo lo contrario y quien se ponga a tu favor no busca el bien común tampoco. No buscas enseñar, no buscas criticar, solo burlarte, denigrar, humillar, menospreciar a gente del fandom y eso está mal, espero y lo entiendas.

Como recomendación a cualquier autor o lector, decirles que el bullying cibernético es dañino, no se debe de hacer. Si con tu crítica no aportas nada, entonces no la hagas, si solo buscas dañar, "bajonear", mal interpretar; hazte ver por un especialista porque tienes problemas. Recuerda, el que busca causar daño, dañado está.

Decirle también al anónimo que inventó una historia conmigo que se haga ver también, porque decir tantas veces lesbiana solo me da entender que tú lo eres y no te aceptas. Quiérete como eres.

Editado: Decidí editar esta parte porque escuché los buenos consejos de algunas personas. Si bien es cierto, no necesito recalcar lo mal que Gordita Infeliz escribe para criticar lo mal que escribimos algunos, me precipité y reconozco mi error. Como me dijeron, no hay mal que por bien no venga y deseo aprender de mis errores. Me gusta escribir y espero poder aprender a hacerlo bien y mejor. No me cierro a la crítica constructiva, ni a lo que me enseñe a mejorar.

Y para cerrar esto definitivamente, dejo una entrada que hizo el Blog de Autores sobre una guía de cómo criticar un fic para todo aquel que desea ayudarnos a mejorar nuestros fics, se las dejo aquí: Quiero criticar un fic, ¿qué hago?

Polizón - II

Hola a todos, como había prometido, otro capítulo más de Polizón y muchas gracias por informarme del plagio de esta historia y por el apoyo que me dieron en defenderla. Un abrazo a todos. Ahora sí, al capítulo.

Favor con favor se pagan.

Tuvo que salir de la caja pues sentía que se asfixiaba con tanto movimiento. Debía inspeccionar todas las cargas en busca de alimento o al menos conocer qué cosas había ahí. Pero el barco se movía demasiado, comenzó a marearse, a tener nauseas y mucho frío, sus oídos zumbaban de manera extraña y todo él comenzó a temblar. El marino Tom tenía razón, podía morir ahí y recién era el primer día. 

Caminó tambaleándose y logró encontrar una caja enorme de correspondencias, cartas y paquetes; tenía mucho que buscar ahí, aunque no había suficiente luz. Regresó a su caja y sacó algunas telas con qué cubrirse el cuerpo y se sentó cerca de otras cajas, esperaría, debía simplemente dejar que el tiempo pasara y evitar ser descubierto. 

Pasadas las horas, algunos ojos rojos brillaban en el oscuro almacén. Las ratas salían a buscar comida, Bill no estaba solo. 

Afuera, en la cubierta, el trabajo de Tom era el mantenimiento de casi todo el enorme barco, debía velar por lo que el capitán le mandase, además de servir a los más de cincuenta pasajeros que yacían en la planta alta del barco, aquellos hombres habían pagado mucho por un boleto, así que debían ser bien servidos. 

Cada pasajero estaba muy bien identificado y colocado en cada cama del lugar, no había espacio para que nadie más decidiera hacerse pasar por pasajero y los hombres que trabajaban en el barco estaban uniformados o tenían algún distintivo. Dormían en grupos turnándose, menos Tom, él tenía una habitación debajo de unas escaleras que llevaban a la planta de arriba. 

Había un acogedor comedor para los pasajeros, el personal del barco se turnaba para comer por lo general en la cocina. 

La noche había llegado, Tom comenzó a preocuparse por el pequeño polizón pues sabía que no sobreviviría. En su vida de marino había visto a muchas personas viajar por esa modalidad, ocultos en el almacén o incluso en los motores del barco, alimentándose hasta de ratas, y algunos morían o cuando eran descubiertos medios enfermos, eran echados por la borda. Él había visto lanzar a muchos, temía por el chico que había dejado en el almacén, pero por otro lado sentía indignación, ¿por qué no le hizo caso?, debió sacarlo de los pelos, total, le hacía un bien. 

—Niño tonto, vas a morir aquí… —Las noches eran frías, muy frías, el barco contaba con calefacción, pero esto no llegaba hasta el almacén. 

Polizón - I

Hola otra vez, les comento que estaré subiendo algunos fics ya terminados aquí, comenzaré con Polizón. En su momento me gustó escribirlo, fue una experiencia agradable. Agradezco el bello banner a mi querida Aliss R aleman, ella sabe cuánto me gustan sus creaciones *.*

Resumen: 

Él solo quería cruzar el océano Atlántico para llegar a América y cambiar de vida, nunca imaginó que estando tres semanas como polizón conocería a alguien que se convertiría en especial.

“Un amor en el ancho mar…”

Autora: Pink Girl

Clasificación: NC 17
Advertencias: Incesto no relacionado, Lemon, Chan.
Género: Romántico, Drama, Universo alterno.
Pareja principal: Bill - Tom.
Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenece, solo la trama.

Banner hecho por Aliss R Aleman

Inglaterra, 1920.

Bill era un pequeño adolescente que andaba en las calles andrajosas de Bedford, buscando algún bocado de pan, la caridad de alguna buena persona; en otras palabras, sobrevivir. Su familia era una sarta de personas que solo pensaban en ellas mismas. Tenía un padre ausente y una madrastra que le torturaba con cuidar a sus medios hermanos todos menores que él… Bill estaba harto y no encontraba sentido a su vida, alguna razón para vivir, nada, estaba estancado, en medio de la desesperanza. 

Bedford, era un bullicio de gente ambulante, cada quien buscaba la manera de sobrevivir. Había muchos ladronzuelos y personas de mal vivir, él no sabía cómo no serlo pues sentía que estaba adelgazando mucho debido a que no se alimentaba bien. 

Robó unas manzanas y salió corriendo por las calles mientras un señor lo perseguía insultándolo con las palabras más feas que ni su madrastra se había atrevido a decir. Así, corriendo, llegó hasta el puerto de Priory, había muchos recovecos en donde esconderse, corrió hasta que perdió al hombre que lo perseguía. Había robado dos manzanas de las cuales una se había caído de sus manos mientras corría, así que un poco resignado comenzó a devorar la única que le quedaba, estaba sospechando que sería lo único que comería pues en casa había comida solo para los niños pequeños. En realidad no quería regresar más… Allá en casa la pasaba mucho peor que en las calles perdiendo el tiempo, delinquiendo y sintiéndose más miserable de lo que ya era. 

Entonces, oculto cerca a la carga de una embarcación, oyó una conversación de dos marineros quienes estaban descansando en el puerto, fumando una pipa. 

—Sabes que allá en América hay más oportunidades de vida, estoy pensando llevar a mi mujer conmigo, las tierras están baratas. 

América, el nuevo continente. Había escuchando tantas historias fantasiosas incluso que vivían salvajes y había sido difícil la conquista, pero que ahora muchas personas comenzaban a viajar buscando nuevas oportunidades. 

Él no perdería nada… Él no tenía nada que perder, no era nadie, y nadie le extrañaría.