miércoles, 30 de octubre de 2013

Artificial - 6

Hola a todos *-* les traigo otro capítulo de este fic, lamento tanto tardar, espero les guste.
Tom recibió una notificación en su domicilio de parte de la fábrica de Bill. Resultaba que habían fallado a la reciente cita pues Tom se sintió incómodo de ir, pero debía. El documento era como un memorándum dicho por un holograma.

“Si no se acerca a la fábrica en un lapso de doce horas, será denunciado”. El holograma desapareció en cuanto abrió el sobre.

—Aishh… —musitó fastidiado e infló sus mejillas para luego expirar el aire.

Bill preparaba el desayuno y Tom había decidido tomar tiempo para cuidar de sus bonsáis, unos arbolitos pequeños y aunque eran híbridos, Tom los amaba porque eran seres vivos que dependían de él, incluso su manzano había dado frutos que no quería comer porque sentía que sería un daño atroz sacarle sus hijitos manzanitos a ese pequeño árbol.

—Creo que debemos ir —le dijo a Bill quien ponía dos platos de comida, uno vacío y el otro lleno, sobre la mesa.

—Eso pensé ayer pero si te lo decía ibas a poner una fea cara.

—También supe que debíamos ir solo que… —Sonrió recordando que ayer se la habían pasado en la casa, besándose, cocinando juntos, hablando de muchas cosas y eso se había sentido tan bien—. Quería estar solo contigo.

—También, siempre quiero estar contigo, pero habrá consecuencias si no vamos.

—Eres muy lógico… —se lamentó—. Debemos ir y mejor ahora.

Ambos suspiraron inflando sus mejillas y botando en aire a la misma vez y luego rieron mirándose a los ojos. Bill era un vívido reflejo de Tom.

*

—El humano compró un auto dual, dejó de ir a la botánica a prestar sus trabajos por quedarse en casa con el robot, han salido juntos todo el tiempo, se han hecho una pareja.

—¿Una pareja? —cuestionó Gordon, el científico—. ¿Qué tipo de pareja?

—No lo sabemos, pero ya no anda solo.

—Vaya, eso es interesante, ¿y el robot?

—El robot tiene voluntad propia y demuestra comportamiento humano, aunque mantiene su lógica.

—Eso es interesante —dijo el científico.

—Me temo que si tiene voluntad, podrá tomar sus decisiones y eso podría ser perjudicial para el proyecto.

—Faltan más de tres meses para que nos lo entregue.

—Pero usted es el jefe —dijo su ayudante y el científico sonrió—. Existe una cláusula en el contrato para retener el robot algunos días para su estudio.

—Retener al robot… —pensó—. Creo que debemos hacerlo, retener a Bill para analizar su dependencia con el humano, quizá eso no sea bueno, quizá no le debió dar voluntad… tantas preguntas. —Se quedó mirando al vacío por un momento imaginándose el mundo perfecto.

El mundo perfecto era sin enfermedades, el mundo perfecto era vivir eternamente bien, sin envejecer, sin morir… el mundo perfecto era un lugar en donde el tiempo pasara sin tener que perjudicar al ser humano. El mundo perfecto era de robots humanos y aunque en ese ideal de mundo no cabía el propio ser humano, el científico y su fábrica planteaba sacar al mercado una serie de robots que serían inmersos en la sociedad como partícipes y no solo servidores del ser humano. Robots compañeros, robots hijos, robots madres, etc. Reestructurar la sociedad con una mentalidad de los “puros” pero con un fin artificial.

—Hagámoslo y veamos la evolución de su comportamiento. —ordenó y todos se prepararon para dicho evento.

*

—Bill.

—¿Sí?

—Creo que no debemos decirle a los científicos que somos una pareja.

—¿Y eso por qué? —cuestionó curioso.

—Puede ser peligroso, pueden quizá separarnos, no lo sé, tengo miedo, es solo eso. —Y Bill comenzó a temer también, Tom parecía hablar en serio.

—De acuerdo, yo no diré nada. —Tom le sonrió ya dentro del auto, debían ir a la fábrica a declarar, pero antes de arrancar el auto, le dio un pequeño beso en sus labios.

Llegaron a la enorme fábrica, un rasca cielo de los más modernos en medio de toda la gran ciudad. Bajaron del auto dual y ya les esperaban los científicos esta vez junto a la robot Ría que vestía de traje ceñido y blanco. Tom le puso mala cara, no le simpatizaba ni un poco aun sabiendo que era gemela de su Bill, y estaba casi seguro de que ella no podría sentir todo lo que Bill sentía.

El científico principal los hizo pasar a una sala en donde pidieron a Bill despedirse de Tom.

—Te veré luego —dijo Tom comprendiendo que debían llevárselo.

—Sí. —Bill se despidió con una sonrisa y se lo llevaron dos sujetos vestidos de blanco.

Fue conducido por un pasillo que él ya conocía y luego entró a una habitación donde lo acompañó la robot Ría.

Bill no quería hablar, se sentía aburrido y había otra sensación nueva, ajena a él, anhelaba estar con Tom y el solo no verlo le producía incomodidad.

—Siéntate —ordenó uno de los ayudantes de científico Gordon y Bill se sentó en el diván blanco. En esa habitación no había nada más que ese diván y un espejo a su frente el cual le incomodaba pues sospechaba que había alguien detrás de ese espejo.

—¿Cuánto tiempo estaré aquí? —preguntó Bill con gestos de incomodidad, todo era registrado por unas cámaras invisibles en varios puntos de la habitación.

—Mucho —respondió sentándose a su lado para observarlo—. Tengo muchas preguntas para ti. —Vio cómo Bill pasaba la saliva en señal de nerviosismo, eso le pareció extraño, los robots no actuaban así.

—Comience ya. —exigió acomodándose en el diván y mirando hacia el frente, hacia el espejo donde sabía estaba el jefe de todos.

—Supimos que tu relación con Tom evolucionó, queremos saber qué tanto. —Bill analizó cada palabra y tuvo temor.

—Él y yo nos llevamos muy bien.

—¿Tienen una relación?

—Relación Humano-Robot, señor. Como debe ser. 

—Entonces tú le sirves en todo, pero sabemos que él te dio voluntad. 

—Le sirvo con voluntad. —El científico anotaba todo.

—Sabes que perteneces aquí y harás todo lo que te digamos.

—Lo sé, siempre y cuando quiera hacerlo.

—No Bill, acá no tienes voluntad. —Bill frunció el ceño ante eso, se había acostumbrado a esa libertad y ahora no sabía qué pensar de las reglas impuestas.

*

Tom lucía nervioso, sentado en el sofá, moviendo sus piernas, mirando a todas partes mientras el científico lo entrevistaba, había sacado un holograma para hacerle ver las firmas que había hecho cuando se llevó a Bill de la fábrica.

—Te muestro esto pues debemos quedarnos con él unos días. —El semblante de Tom cambió en segundos, ¿qué quería decir que se lo debían quedar?

—No entiendo…

—Bill se quedará aquí.

—Pero usted dijo que solo le preguntarían cosas y luego regresaría conmigo. —Era evidente el nerviosismo que Tom sentía, eso pudo percibir el científico Gordon quien sonrió de lado, Tom se había enamorado y ese concepto era solo teórico para muchos seres humanos de ese tiempo… el amor había dejado de existir por tantas razones de la historia. 

—Tom, no regresará hoy, lo hará cuando hayamos terminado y recién empezaremos. —Tom se ofuscó, se levantó del sillón y se le acercó poniendo ambas manos sobre el blanco escritorio. 

—Usted no entiende, Bill me pertenece. —Pero Tom mismo sabía que no era así, lamentablemente no le pertenecía, pertenecía a la fábrica.

Sintió algo en su pecho parecido a un dolor y su corazón se aceleró del temor de no regresar con Bill a casa, pero lamentablemente el tiempo pasó y le pidieron regresar a casa sin Bill.

Tom regresó sin ánimos para, al cerrar la puerta, sentarse en el suelo con el extraño dolor que lo llevó al llanto, era la primera vez que se sentía tan solo y eso que había vivido gran parte de su vida solo e independiente, pero nunca había creado un lazo significativo con otro ser humano aparte de su abuelo y ahora Bill.

Era cierto lo que leía en los libros, que muchas veces el amor solía doler, era eso lo que sentía, un dolor que lo desesperaba y llenaba de otros sentimientos extraños como la impotencia y las ganas de cometer alguna locura para recuperar a Bill.

*

Los científicos observaban a Bill totalmente decaído.

—Está enamorado —dijo uno de sus ayudantes.

—Tonterías, solo se ha acostumbrado a su amo, a veces pasan por una pequeña desadaptación conductual, es de esperarse, hasta que su sistema se acostumbra al cambio.

—No lo sé, señor, esto es diferente.

Observaban a Bill junto al otro robot Ría, lo tendrían dos semanas en prueba.

Lo siguiente que pasó fue que el mismo dueño de la fábrica se lo llevó a casa, quería vivir con Bill por esas dos semanas y así ver de cerca su parecido a un humano, pero no cualquier ser humano, uno del tipo puro que consideraba los sentimientos y esas cosas ya extintas. 

Bill tuvo que bajar la cabeza muchas veces, era evidente su incomodidad, pero no podía protestar, Gordon era su verdadero dueño, su creador, le debía respeto o su existencia estaría en peligro. 

No pudo protestar cuando lo llevó a casa y le pidió dormir juntos, Bill debía atenderlo como todo robot atiende a sus dueños, sin protestar.

—¿Por qué tan incómodo? —reclamó Gordon, recostado en la cama.

—No, no. —No sabía qué excusa poner y sonrió amablemente.

—Así me gusta, aunque sé que finges, tú no quieres estar aquí.

—Pero debo.

—Sí, debes, sobretodo obedecerme. —El científico de desabrochó la camiseta estando ya en su cama y Bill sintió cierto temor, la idea de pertenecerle a Tom y solo a él le torturaba—. Quítate todo. —Bill bajó la cabeza y estando cerca de la cama comenzó a quitarse la ropa, sabía muy bien lo que el científico quería hacer.

La búsqueda de placer era tan individual, el científico nunca había intimado con alguna persona, siempre habían sido robots, pero con Bill se sintió un poco incómodo debido a su lentitud y poca colaboración pese a sus órdenes, se sentía obligado… como quizá una persona con voluntad se hubiera sentido.

—¿Qué pasa? —reclamó cuando se sentó desnudo en la cama y ni quería mirarlo.

—No quiero —fue sincero, no quería.

—¿Por qué? Ustedes también sienten mucho placer. —Bill sabía eso, estaba programado para que si lo tocaran mucho él respondería de manera sexual, y le gustaría, lo sabía, pero el pacto que hizo con Tom no salía de su mente, además la sensación de tristeza por extrañarlo pesaba mucho más que la simple idea de gratificarse sintiendo cosas agradables.

—Es Tom.

—¿Tom? —preguntó acariciando su cuello, buscando activarlo sexualmente.

—Tom, mi Tom, lo extraño.

—¿Cómo puedes extrañar? Solo te acostumbraste a él. —Bill continuó sin mirarlo y solo sintió el calor subir a sus mejillas y la respiración más acelerada. 

—Mi mente no deja de pensarlo, mi sistema no deja de creer que le pertenezco, estoy perdido, solo quiero verlo. —Gordon nunca antes había escuchado a algún robot decir algo semejante y se inquietó, su proyecto de repoblar la tierra con seres lo más parecido a los seres humanos podría dar resultado, así que no quiso obligar a Bill a intimar, solo lo jaló del brazo y lo recostó a su lado, Bill de forma sumisa, se quedó quieto, esperando por las acciones del otro que no llegó y suspiró aliviado. Pestañeó y sus ojos dieron con la mirada de su verdadero dueño quien lo miraba con lujuria, de todas formas su creación era perfecta, tal como él lo había diseñado. 

Le dio un beso para probarlo y luego lo dejó tranquilo, saliendo de la cama para buscar otra donde dormir, eran tan individualistas que la idea de dormir cerca a otro les incomodaba. 

*

Dos angustiosas semanas en donde Tom supo lo que es la depresión, el sufrimiento incontrolable de extrañar a alguien y la desesperación por no poder revertir o cambiar ese destino a voluntad.

Leyendo los libros de papel de varias décadas atrás, las novelas de amor, todas eran sufridas y se lamentó por haber caído en eso… en amar cuando podía haberlo evitado.

Arrastraba el paso, ya no iba a prestar servicios a la botánica, no salía de casa, solo se quedaba en la cama pensando y pensando en Bill y mientras más pensaba más aumentaba la tristeza, pero pese a eso, no quería dejar de pensar. 

Las ganas de comer habían desaparecido y aunque se preocupaba por eso, no podía evitar dejar de hacerlo.

Las acciones más descabelladas que hizo en las dos semanas, fue permanecer casi tres días en la puerta de la fábrica, buscando hablar con algún representante, alguna forma de contacto o explicación sobre Bill, pero nadie le dio respuesta, eran órdenes.

En esas dos semanas Bill estuvo en un cuarto lleno de robots con su misma cara, debía enseñarles a cada uno de ellos sus aprendizajes. Estaba molesto por no sentirse único, ¿por qué no podía ser una persona y librarse de todo eso? Se dio cuenta que no era más que un simple robot programado y por más que desarrollara sentimientos eso no cambiaría su condición… y sintió miedo de ver a Tom otra vez, si Tom se ilusionaba con él, ¿qué sería de ellos? Jamás algo así podría funcionar.

Al cabo de las dos semana Bill se había adaptado a su nueva “vida”, ir al centro de los robots a enseñarles cómo hablar con gestos, dar discursos y cosas parecidas, incluso había hecho una amistad cercana con la robot Ría, a pesar de sus diferencias, pudieron entenderse pues a ella le daban cargos importantes así como a él.

—Quiero irme a casa —comentó Bill en su último día, solo que no sabía que era el último.

—Casa… —habló ella no entendiendo el concepto más que solo el teórico.

—Casa, junto a Tom. —Sentía un vacío que no sabía cómo describir, ¿tanto pudo acostumbrarse a un humano? Todo su sistema funcionaba por inercia más que el deseo de existir como pasaba cuando estaba con Tom.

Pronto, Gordon se le acercó serio y le tomó del brazo.

—Regresas a casa hasta nuevo aviso. —Era evidente la emoción del robot, pese a ser uno, casi su cuerpo desborda de energía y un gritito de emoción salió de su boca.

Como si hubiera vuelto a la vida, era conducido hacia la salida de la enorme fábrica y lo dejaron ahí.

Gordon pudo ver cómo, ni bien salió, aceleró el paso, ni pidió un auto, no quiso perder tiempo, solo, como las aves al salir de la jaula, fue libre y nadie pudo detenerlo; así que se puso a pensar si algún ser humano reaccionaba así, ir hacia otra persona con esa energía y determinación. Había visto el amor, algo que era casi extinto y no pensó que un robot podría desarrollar esa “habilidad”.

Bill corría por las calles congestionadas de robots de todo tipo y algunas personas caminando solas. Se sentía tan emocionado que no sabía lo que le diría a Tom cuando lo viera a la cara. 

Le tomó cerca de dos horas, las cuales no las percibió como largas, llegar a casa, solo sabía que debía continuar y su radar interno le ayudó a tomar el camino correcto y estar frente al departamento de Tom al cual debía subir algunos pisos por el ascensor y eso sería todo.

Llegó y lo que le extrañó fue ver las plantas marchitas de la entrada de su departamento cerca de las nubes. Estaban secas y le preocupó.

Tocó la puerta y luego de muchos minutos un muy delgado y decaído Tom abrió la puerta.

Bill seguía igual de perfecto, pero Tom, con el cabello desordenado, más delgado, más pálido no sabía cómo reaccionar, solo sonrió y casi lloró de la emoción de solo verlo.

—Tom… —dijo emocionado y Tom lo abrazó aliviado de tenerlo, la vida había regresado a su miserable ser en ese instante—. ¡Tom! —Se separó para verlo a los ojos—. Estás delgado, ¿estás bien? —Tom negó con la cabeza.

—Creí que no volvería a verte, se sintió muy horrible. —Bill acarició su rostro con ambas manos y Tom lo jaló de la cintura al interior de su casa.

—Lo sentí así también, pero ya estoy aquí, te extrañé mucho.

Tom cerró la puerta tras sí, condujo a Bill hacia la pared más cercana que vio y lo besó con ganas reprimidas de dos semanas sin verlo. Lo añoraba, deseaba sentirlo.

Oh, dulces besos, Bill sonrió entre cada uno de ellos y se aferró a Tom para dejarse besar todo lo que el otro deseara hasta que jadeó entre un beso y eso llamó la atención de Tom provocando que se detuviera.

—Oh, no, no te detengas —dijo excitado y Tom sonrió ante eso. No sabía que un robot podría reaccionar de esa manera.

—Mejor no te beso tanto, podría cometer una locura —dijo con su frente apoyada en la suya.

—Mi Tom puede hacer muchas cosas conmigo. —Tomó una de sus manos y la entrelazó—. Siento que he vuelto a renacer. —Tom sonrió ante eso.

—Quisiera que me dijeras qué tanto fue lo que hiciste allá… ¿sabes? Tengo miedo que te alejen de mí, llegué a creer que moriría, siento que mi amor me tiene esclavo a ti. —Bill se puso serio, no quería explicarle ciertas cosas que había vivido.

—Te las explico si me permites cuidar de ti, mira cómo estás… alguien necesita comer algo. —Tom sonrió un poco y le dio un beso.

Suspiró aliviado de tenerlo otra vez, pero el temor de que Bill no le pertenecía lo asustaba y mucho.

¿Qué les parecieron los planes del científico? xd y bueno u_u se vienen tiempos difíciles para ellos que no sé cómo solucionar... ¿sugerencias? 
Comentarios, sugerencias y críticas son bienvenidas. Gracias por leer. 

5 comentarios:

  1. *-* al fin subiste cap! Esperamos demasiado-.-

    pues queremos sexo intenso y romántico jajaja /-'

    Luzy.

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  2. Un mundo perfecto, una clara utopía porque aunque los robots puedan "reemplazar" en cierta manera el papel de los humanos seguirán siendo robots y aquí me da pena el caso de Bill porque a pesar de que es casi un humano sigue siendo un robot. Un robot que ama, siente, tiene voluntad pero lamentablemente pertenece a un proyecto y no puede ser de Tom.
    Ainnsss antes de que empiecen las complicaciones yo quiero sexo intenso, de reencuentro, que hagan el amor para que Bill sienta la diferencia entre "sentir" porque es parte de su programación a sentir porque en verdad desea a Tom, porque lo ama y no solo por cumplir con su deber de robot.
    Besos Karla y soy Adriana Galvan (Ady) de Facebook.

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  3. Waaaaaa! Lo amo, lo amo, lo amo, lo amo, xd Por faaaaa! continua *-* siiiiii? Me parece tan tierno y original la fic *-* c: Besos :*

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  4. OH!Ni me habia dado cuenta qu publicaste el capi!! :c
    Ese cientifico quiso APROVECHARSE de Billito!!! -_-
    Y él por su programación casi se deja pero el hombre se dio cuenta y se quedo con las ganas! QUE BIEN!! y mientras tanto Thomas se convirtió en una PILTRAFA HUMANA de tanto extrañarlo :c y su robothumanizado tmb lo añoro dejando asombrados a su creador y demás personal de la fábrica. Y el reencuentrooo fue tan dfkgjhkjlkfjg *.*
    ah! el amor, el amor!!! ME EMOCIONAAA TANTO esta relación !
    Disculpas por el atrasooo en leer y comentar!!! Cuidate DamitaRosa :) ♥

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  5. Hallo querida pink! al fin comentando aquí :I
    ya vez uno sin tiempo o puede hacer nada u.u y bueno al fin actualizaste artificial :D eso me alegra!
    todo se ve interesante *-* me encanta como Bill y Tom se enamoraron tan rápido y tan lindo pro que el amor es algo extraño y muy único ahí ♥
    lo unió malo es que ya es muy obvio y eso podría ser un daño para ellos u.u
    aparte que los científicos ¬¬ grrr desde el comienzo tenia en mente que tenían una idea así pero viéndola con la explicación y todo pienso que... es algo totalmente estúpido sinceramente la humanidad no ganaría nada con robots que se creen humanos, seria tan mecanizado, y según yo creo se volvería todo un caos, y para que serviría? solo dejarían como un "lo que quedo de la humanidad" pero para quien? para los robots? para nadie! é.é si los científicos creen que los humanos son tan desechables e inútiles ya que se maten ellos por inútiles :I solo digo!
    no me gustan nada sus planes y claro tampoco le creador de Bill tan cabron ¬¬ entiendo casi todos los humanos son asi pero... pobre Bill :(
    bueno pro lo menos si noto que Bill estaba enamorado y todo y ps lo respeto! hasta eso é-é mínimo si no...~saca las armas~
    otra cosa que ya o me esta gustando mucho es como todos son tan exageradamente fríos... ni duermen en camas juntos y solo juntos para reproducirse, casi no existe el amor, con las familias como algo casi inexistente u.u es... no se muy feo si unos científicos crean robots para "reemplazar" a la humanidad por que no mejor ellos mismos ven que con ese comportamiento se están matando y extinguiendo é.é la solución no serian robots con emociones seria crear emociones en las personas u.u pero no...
    Bill en su tiempo sin Tom.... dios me senti mal pro el u.u digo es genial que sienta y todo pero que le den una vida tan monótona y solo para transmitir conocimiento a otros de una forma mecanizada, le quitaro por un tiempo la "humanidad" que adquierio de Tom... todo eso que lo hace unico se lo transmite a lso demas, eso aria que no fuera único u.u o eso creo...
    y pues... odio que salga la robot femenina (de quien no diré el nombre pro que solo leerlo me desagrada ^^) simplemente a mi no me agrada NADA la idea de incluirla tanto en un fic u.u entiendo es la emmm otra robot (el titulo "gemela" también se me hace una ofensa a Bill D':) pero ps no me gusta que salga x'D me pone de nervios!
    mejor ya ya me vuelo eso y en otros temas... mi vida! Tom sin Bill ;^; de verdad se puso muy mal, claro el amor es algo extrañisimo ahí y que las personas sepan como enfrentarse a eso ps no ha de ser muy simple en ese mundo u.u
    la verdad no se que aria Tom sin Bill como cuando lo tenga que devolver a la fabrica... uy! si eso fue en 2 semanas no me imagino en mas u.u o si la profecía del robot se hace real... ;^; no no! ojala no pase u.u
    las cosas avanzan bien ya quiero ver como se desarrolla eso que planean los científicos D: y ver si algo ya pasa (mueve las cejas) haha todo se pone genial ^^
    sigue asi pink! besos! byebye (~*3*)~

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