domingo, 29 de diciembre de 2013

Adultez - 18

Hola a todos *-* espero les guste este capítulo aunque no sé u_u debo advertirles que estoy siguiendo las características de mis propios personajes, espero entiendan a Tom xd veremos qué les parece este capítulo. Gracias a todos los que comentaron la otra vez *-*
—Tom… dijimos que hoy compraríamos mis libros… —dijo con la voz entrecortada.

—Mañana…

—Hoy, tiene que ser… —se atragantó de tanta excitación—. No puedo creer que estemos haciendo esto, ¡Tom! —chilló cuando sintió los dedos de Tom en su trasero, sus pulgares en su entrada.

Tom le había dicho que le enseñaría muchas cosas. Estaban ya varios días los dos en su departamento. Bill se había quejado y el castigo era justamente ese, debía hacer todo lo que Tom quisiera y luego podría reclamar.

Ambos desnudos luego de un largo baño de agua caliente estaban en la cama. Tom estaba recostado con Bill sobre él pero con el detalle de que estaba de espaldas apoyándose en las piernas de Tom con el trasero totalmente expuesto a él.

Ya ni sentía vergüenza, solo era la excitación recorrer su cuerpo incluso poco le importaba el dolor en su pierna, Tom trataba de sostener su peso.

—No puedo creer que… que seas capaz de eso, ¿lamerás mi trasero? —preguntó queriendo mirar hacia atrás—. No puedo creerlo Tom, eres muy raro…

Tom no decía nada, estaba muy entretenido en cierta parte del cuerpo de Bill. Amaba que sea sumiso, que luego de protestar e insultarle, terminara así, con el trasero al aire esperando más de él.

—Hum, por qué mejor no te concentrar en… ya sabes —rió Tom—. Tú querías aprender, te estoy enseñando.

Bill le había confesado el interés que tenía por experimentar cosas nuevas, le susurró a Tom que quería que le enseñara sobre sexo ya que se sentía un poco ridículo y hasta infantil cuando intimaban y forcejeaba resistiéndose a Tom por su falta de experiencia. A Tom le gustó mucho esa petición, y le re juró que le enseñaría todo lo que sabía.

Vivían una especie de luna de miel, solo salían para comprar comida y regresaban al departamento a intimar. La vida parecía divertida así, sin presiones aunque Bill pensaba y se estresaba muchas veces con la idea de que pronto entraría a la universidad.

Bill descendió la vista, apoyado en sus manos a los lados de las piernas velludas de Tom, miró un poco hacia abajo y vio su pene erguido reclamando atención. Tragó saliva.

—No sé cómo —susurró y luego cayó en la cama apoyado en sus codos, alzando más su trasero pues Tom había empezado a lamerlo—. ¡Tom! —sentía que su cabeza daba vueltas, la excitación era como una corriente eléctrica que viajaba por todo su cuerpo calentando sus mejillas.

—Sólo lámelo, vamos Bill… te necesito.

Bill no supo cómo, cómo pudo atreverse, con los ojos muy bien cerrados hizo caso a Tom y deseó tanto que Tom lo penetrara de una vez con eso tan grande que tenía en su boca.

Sus deseos no se hicieron esperar, Tom lo jaló hacia él y lo sentó sobre lo que tanto quería sentarse, giró su rostro y lo besó. 

Apenas era la mañana y habían empezado de esa forma. Esta vez el sexo duró más tiempo dejándolos totalmente cansados sobre la cama, Tom suspiraba hondo y se preparaba para dormir.

—Ni se te ocurra —reclamó un somnoliento Bill—. Debemos ir por mis libros.

—¿Y si nos bañamos otra vez? —pidió con una sonrisa.

—Toooom… —Bill ya sabía lo que quería, sexo en la ducha era algo que practicaban últimamente—. Ya ni podré caminar pero porque no tendré trasero.

—Hay otras formas, lo sabes.

—Aishh, Tom, no, debemos ir por mis libros. —Tom suspiró resignado.

—Está bien —dijo eso y Bill se apoyó en su pecho desnudo para descansar un poquito.

—¿Sabes? Quiero que tú seas el único, aunque yo no sea ya el único para ti. —Ese era un tema que a Bill le incomodaba un poco, pero quería que Tom entendiera que lo que habían comenzado debía mantenerse así, que ellos ahora eran una pareja y no quería vivir otra vez la sensación de perderlo.

Tom se quedó pensando en el silencio, lo que Bill le pedía para él era un poco difícil, no podía engañarse a él mismo, pero una cosa podía hacer, evitar mirar a otras personas y lo haría porque Bill se había convertido en alguien importante para él.

*

Comprar libros no era tan divertido si necesitaba apoyarse en una muleta cada vez que tenía que caminar.

—Son carísimos Tom, acá solo saldremos pobres, debemos ir a la zona popular. —reclamaba Bill pues Tom había insistido en llevarlo a librerías de prestigio como debería de ser.

—Necesitas libros nuevos, vas a empezar el año.

—Necesito más de diez, comprando solo uno de esta tienda se acabará mi presupuesto. —Tom torció la boca y sacó una de sus tarjetas de su billetera.

—Pues usa esta.

—Tom… —reclamó—. Ya hablamos de esto, sabes que no me gusta que me des tu dinero, tengo ahorros para mis libros, si los compro de segunda mano podré costeármelos yo mismo.

A Tom le molestaba eso de Bill, para él no era posible el hecho de comprar libros usados aunque Bill le dijera que era lo mismo, que podría leer lo mismo que un libro nuevo a Tom le parecía hasta asqueroso tener libros usados.

Avanzó hacia el cajero de la tienda y le dio una lista de libros y su tarjeta.

—Quiero todos estos. 

—¡Tom! —Bill casi corrió a su lado—. Te pasas, ¿cómo te lo pagaré? ¡Me estás endeudando!

—Tómalo como un regalo.

El chico de la librería comenzó a buscar su pedido uno a uno mientras Bill hablaba por teléfono con su mamá para decirle que ya tendría sus libros. Tom observó la librería… él también quería libros sobre administración, él también debía planificar su vida, no se la pasaría todo el tiempo en el departamento con Bill, debía planear qué hacer o su familia le caería encima y le cancelaría sus tarjetas otra vez.

Su vista se enfocó en la ancha espalda del joven que sacaba los libros para ponerlos en bolsas de papel. El chico tenía cabello largo y lacio, aun no veía su rostro, pero Tom repasó con su mirada ese cuerpo.

A él siempre le gustó lo femenino, las mujeres, la delicadeza de Bill lo mismo encontró en Andrej, ese tipo de cosas llamaban su atención, pero nunca un hombre como el que veía, de fuertes brazos y cuando se giró hacia el mostrador para poner otro libro más, Tom observó sus facción y tragó saliva. 

Los ojos verdes del chico chocaron con los chicos y éste se atrevió a giñarle un ojo ocasionado un calor extraño en Tom quien tuvo que retroceder y buscar con la vista a su Bill. Éste hablaba con su mamá sin prestarle atención así que se sintió un poco cómodo con eso y regresó su vista hacia el joven. Su ancha espalda, sus brazos fuertes le llamaban la atención de una forma extraña, no era como si quisiera acariciarlo, era más bien al revés, quería que ese hombre lo acariciara a él. Ese pensamiento le hizo fruncir el ceño, pero a la vez morderse el labio lo cual llamó la atención del joven que lo atendía.

—Ya casi tengo su pedido…

—Hum… joven…

—Me llamo Georg.

—Georg, ¿siempre trabajas aquí? —tuvo las ganas de conocerlo un poco más, quizá como una forma de saciar su curiosidad, nada más eso.

—De lunes a viernes y por las noches trabajo en un gimnasio…

—Oh… —Tom sonrió interesando en eso.

—Gimnasio.

—Sí, está invitado —sacó una tarjeta de sus pantalones y se lo pasó. Tom sonrió y luego buscó con la mirada a Bill, aún seguía hablando por teléfono mirado hacia la puerta—. ¿Con quién tengo el gusto? —preguntó con una sonrisa y Tom pestañeó seguido.

—Tom, Tom Trümper, mucho gusto —extendió una mano y Georg se la tomó.

—El gusto es todo mío. —Una caricia íntima se formó en ese estrechar de manos, Tom sintió su corazón acelerarse. No podía creer lo rápido que había progresado en esa pequeña interacción con el joven. Pero luego una incomodidad le hizo soltar la mano y darle la espalda a Georg para ir con Bill.

—Un momento —dijo Bill a su mamá—. Tom, creo que debemos ir donde mi mamá…

—¿Por qué, qué pasó?

—Hoy entierran al señor Hans, ¿lo recuerdas? Lo encontraron muerto en su casa… —Tom recordó a ese anciano con problemas mentales que vivió enamorado de una sola mujer pero tuvo muchas en su vida que al final le hicieron la vida imposible.

Sintió una pena extraña y olvidó por un momento los ojos verdes del chico de la librería.

Ayudó a Bill a subir a su auto con la bolsa de papel de sus muchos libros. Irían a la casa de Simone para luego ir al cementerio.

Tom manejaba el auto de Bill en silencio, quería preguntarle muchas cosas pero no se atrevió.

—Me pregunto si se habrá encontrado con su amada María Ana o con sus tantas mujeres más… de seguro en el Paraíso no lo dejarán en paz…

—No digas eso —dijo Tom con el ceño fruncido.

—Es la verdad, sus muchas mujeres murieron y donde quiera que esté de seguro le reclaman. —Tom se incomodó, pensar en morir y encontrarse con cada uno de sus parejas se le hizo horrendo.

—Mejor no hablar de eso. —Bill lo miró curioso y se percató de su incomodidad. Se cruzó de brazos y suspiró.

—Vaya, Tom… —rió sarcástico—. Prefiero no pensar en morir y tener que pelearme con todos los que has tenido en esta vida. —Tom no decía nada y el ambiente se llenó de un silencio sepulcral. 

Llegaron a casa y Simone les contó con lujo de detalles todo el drama. Fueron todos al cementerio donde una tétrica ceremonia se realizó con la pelea de los medios hermanos que habían quedado, el señor Hans había tenido varios hijos en la clandestinidad y ahora se peleaban por la herencia que dominaba su última esposa.

Tom miró la escena con disgusto recordando el rostro del anciano y la lección que había aprendido de él, la lección sobre amar a una sola persona.

Bill buscó la mano de Tom mientras lanzaban las flores sobre el ataúd, lo notaba distante, serio, incómodo y quería saber por qué.

—¿Todo bien? —preguntó comprensivo y Tom asintió—. Tom… —No le creía.

—Sí, estoy bien, no pasa nada.

—Estás distante…

—Es el ambiente, sabes que no me gustan.

—Comprendo —dijo bajando la cabeza.

Luego de ver el drama de los familiares pelearse por la herencia en pleno funeral, decidieron que lo mejor era retirarse. Ya oscurecía e irían a casa de Simone a cenar. Bill usaba unas ridículas muletas, pero Tom siempre lo ayudaba.

En la pequeña casa, Simone compartió un pastel con los dos presentes, notando así el desgano de ambos.

—Mi hijo entrará este lunes a la universidad —dijo a Tom como para que tomara conciencia de que no debía distraer a su hijo en otras cosas—. Necesita recuperarse y que lo apoyes en eso.

Bill miró a su mamá con cara de niño molesto. —Mamá… —reclamó en tono cansino.

—Nada, mejor decir las cosas claras, cuando uno vive una vida en pareja a veces se abstrae del mundo y solo se vive para la pareja, no quiero que descuides tus estudios ahora que viven juntos. —Tom se puso a pensar en eso, ¿pasaba así con él? Sentía que no, sentía como si hubiera conquistado una gran montaña que representaba a Bill pero no se sentía del todo satisfecho, sin embargo, disimuló una sonrisa para Simone.

—No se preocupe, Bill estudiará mucho, ya compramos sus libros —sonrió a Bill y éste también sonrió para luego suspirar, eran libros nuevos, jamás pensó en tener algo así antes. Tom también suspiró y luego se puso serio al recordar el apuesto chico que los había atendido. Golpeó la mesa un poco incómodo, sabía que hacía mal en pensar en alguien que no era nada suyo.

Simone le dio una frazada a Tom para que durmiera en el cuarto de huéspedes, era muy tarde para regresar a casa y aunque Tom no quería quedarse, aceptó.

Bill entró al cuarto de Tom y lo jaló de la mano para llevarlo al suyo, esperaba que su mamá entendiera que así debía ser. Tom solo se dejó escuchando la risita de su novio.

—Oye, no haremos nada —dijo Bill en cuanto Tom quería tomarle el trasero.

—Oh, vamos…

—Hablo enserio, mi mamá podría oírnos, solo no quiero que duermas en la otra habitación, pero cálmate, hoy no habrá nada. —Tom suspiró resignado y se acomodó al lado de Bill.

La oscuridad y el silencio los envolvió en una burbuja agradable donde se abrazaron y Bill apoyó su cabeza en el pecho de Tom, se sentía tan enamorado, como descubrir algo nuevo en su vida y quería estar así por siempre.

Tom miraba hacia la pequeña ventana con cortinas floreadas, veía el mecer de éstas por el poco viento que entraba. ¿Estaba enamorado? Se asustó de solo dudarlo, pero ahora no sabía, era como sentirse cómodo pero no satisfecho, quería sacudir a Bill y proponerle algo sucio, algo que le calmara esa especie de ansiedad.

—Oye Bill, no puedo dormir… y sí…—Pasó una mano por su trasero y Bill se removió.

—Nou… —Tom frunció el ceño y luego a su mente vino los ojos verdes del chico de la librería.

—¿Puedo preguntar algo? —Bill asintió con los ojos cerrados y Tom enmudeció, ¿cómo le preguntaría semejante cosa? Tragó saliva.

—Sí, anda, dime —habló somnoliento y acarició su pecho con una mano.

—Verás… ¿cómo sabes que estás enamorado? ¿Estás enamorado? —Bill soltó una risita.

—Claro que sí, lo sé porque lo siento así, qué pregunta, Tom —se quejó un poco y suspiró cerrando los ojos otra vez. Tom se sentía preocupado, ¿y si no amaba a Bill? ¿Y si nunca podría amar a alguien? No supo por qué pero esa noche se sintió necesitado de alguien a pesar de estar con Bill—. Tomi… —llamó con voz infantil—. ¿Me amas? —hubo un silencio incómodo, Tom se removía en la cama—. Tom… —comenzó a angustiarse.

—Sí. —contestó para que no se impacientara y luego se tensó—. Bill… —quiso decirle muchas cosas, que creía no tenía corazón, que no lograba sentir nada, que la emoción se había ido y quería hacerle el amor de manera fuerte para que todo volviera a como era hacía algunos días, pero Bill ya se había dormido con una sonrisa en sus labios, Tom lo amaba o eso creía él…

“Debes estar bromeando, Tom”, pensó en la oscuridad, aun con Bill en sus brazos. “Bill es precioso…” “¿Y?” contestó una mala voz en su cabeza, “lo amo”, se dijo él mismo, pero la otra voz se rió de él mismo, “Bah, ¿enserio? ¿Cómo lo sabes? Estoy seguro que te cansaste de él”, frunció el ceño, “no, no me cansé, Bill es genial, es todo lo que quiero…” “¡conformista! Dejar otras oportunidades, Tom… oportunidades de experimentar algo nuevo, como por ejemplo ese chico… ese chico que no es afeminado…” “me gustan los afeminados, todo lo que es bonito”, “sí… lo sabes, sabes lo que te gusta como también sabes que cuando algo te llama la atención debes ir por él, ¿acaso perdiste tu esencia? Ya conseguiste todo de Bill, ya no hay más.” Eso le asustó y mucho.

Durante la semana en la que Bill tenía que mantener reposo por su pierna, Tom le estuvo enseñando y descubriendo muchas cosas de su intimidad. Conocía cada rincón de su cuerpo, le había enseñado algunas perversiones y se había deleitado en hacerlo además de intimar casi tres veces al día, todo había sido fantástico pero ni bien salían de compras había regresado con una especie de insatisfacción que no sabía cómo explicar.

“Debes hacerlo, Tom, sabes que no estarás tranquilo…”, la voz malvada en su cabeza sonó y cerró los ojos imaginando lo que sería sentir de otra manera el sexo, oh… él nunca había fantaseado con ser un pasivo, eso jamás se le pasaría por la cabeza mucho antes, pero así como él nunca había fantaseado con enamorarse de un niñero, no desistió hasta conseguir su objetivo y ahora que lo tenía en sus brazos seguía sintiéndose sediento…

“No voy a salir…”, pensó en una solución, “me quedaré junto a Bill.”

Pero lo que Tom no sabía era que el vendedor de ojos verdes había evitado poner un libro en la bolsa… faltaba uno y sabía que ese cliente en particular regresaría por eso o quizá por alguna otra cosa más…

¿Qué piensan de Tom y de Bill? ¿Qué creen que pasará? Espero me lo hagan saber... ¿Comentarios? *-*~

17 comentarios:

  1. Como siempre odio a Tom.... Las personas si pueden cambiar, él no es menos...

    Me gusta la historia pero a la vez me decepciona... osea no sé como explicar... como sabes es un fic en el que Bill a sufrido mucho y que Tom sea así me patea las pelotas que no tengo... Bill merece ser amado y Tom dejarse amar por él... Estoy ya cansada de leer dolor, infidelidades tanto físicas como en pensamientos... Solo espero que esto termine bien, sino creo que me quedaré insatisfecha con el fic...

    Bueno ahora espero que no me odies... xD Es mi humilde opinión, me gustan las historias de final feliz o muy trágico, pero de verdad trágico y dramático no pega en esta historia, uno feliz si!

    No tengo más que decir. Buenas noches :)

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    1. la vida no es color de rosa u_u me es difícil hacer que un personaje cambie de negro a blanco, Tom es así, no es un buen personaje, tuvo una infancia que lo llevó a ser así y creo que un final del todo feliz no va con este aunque Bill no se lo merezca, esto que está pasando Tom es necesario para entrar a la parte final, no lo podía concluir con "y vivieron felices por siempre..."
      <3

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  2. ¡Noooooooo! Este capitulo me dio tantos sentimientos encontrados, al principio estaba emocionada por el lemmon, apartee senti bien por Bill y Tom felices, despues viene hermoal Georg a volver a sacar el interior guarro de Tom y hasta hace que Tom fantasee en ser el pasivo, dios eso es demasiado! Se que algo.pasara entre estos dos y antes hubiera preferido que Tom engañara a Bill antes que Bill a Tom pero ahora no se, me siento muy mal por Bill, el esta super enamorado y Tomas esta indeciso! Ya no se que pensar solo se que me encanto el capitulo <3 y espero con ansias el proximo Pink :3

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    1. XDD sí, no sé, un día estuve pensando en la mente de Tom, en eso que no tiene límites y pensé que le gustaría probar tantas cosas y ese es uno de sus talones de aquiles, no digo que pasará algo con Georg, pero de que le moverá el piso lo hará y Bill debe aprender a darse cuenta de muchas cosas...
      veremos qué más pasa...

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  3. ¡qué? Ô_Ô no entiendo a Tom, ¿qué le ocurre? ¿En serio que está esperando perder a Bill por siempre o qué ondas? Tom idiota ù.ú jamás ha sentido algo así por nadie más, y aún duda que esté enamorado... :S

    espero con ansias...
    Cuídate! Besos!

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  4. Crero que me resignaré a dejar de leer Adultez hasta que lea algo positivo de Tom. Está confundido y aún sigue siendo un zorro :( no lo soporto ;-; Y ni que decir, ahora Georg ;-; mi dios, djhsmxnchdscnxfhjxdf xdddd

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  5. Joder estaban en pleno 69!!! Cómo voy a dormir con los Kaulitz y esa pose? ! Bill aprender diferentes posiciones sexuales, no te hace ni un pervertido o sucio. Al contrario ayuda a entablar más comunicación e intimidad con la pareja.
    Tom pasivo? Vamos Bill, agarralo y dale duro, jsjej para que así se le quite el.coqueteo con ese zorro de Georg.
    Dicen que nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido. .vamos Tom, recapacita ya perdiste a Bill. Yo sé que puedes cambiar. ..

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    1. Je je se me olvidó mi nombre! Soy Adriana Galvan o Ady!.

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  6. Bueno Creo que Tom es un pendejo con todas sus letras y remarcadas en rojo, no sabe ni que jodidos le pasa por la cabeza y Bill es esta enamorado de la idea del amor y Tom no se lo merece, pero Bill a sufrido tanto que se merece un poco de felicidad y para él es el imbécil de Tom... ahora con Georg a la vista las luna de miel de Bill ya tiene fecha de caducidad.

    Espero que las cosas no empeoren por el bien mental de Bill...

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  7. No se mí para que pedí capí nuevo :( sabía que términaria sufriendo por culpa de Tom, aunque trato de entenderlo nunca antes a amado y es lógico que sienta dudas respecto a ese sentimiento nuevo, creo que llorare de frustración xd

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  8. Me dio tanta cólera la actitud de Tom es cierto las personas no cambian de la noche a la mañana ...pero no se; siento que al menos lo estaban intentando porque porque al fin había notado que lo amaba... ahora duda?...es raro puedes dudar el querer cambiar o no , pero el amor no, incluso cuando estas con alguien mas..Bill ya ha pasado por demasiado y si Tom no va a cambiar es mejor que se quede con alguien que si lo valore ...ahhhhhhhhhhhhhhhhhh

    me estrese TwT creo que vivo demasiado el fic xD

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  9. T_T todos odian a mi personaje, pero olvidaron que él no es un príncipe azul :c él nunca fue buen amante, no sabe de esas cosas... es difícil que cambie tan rápido o que cambie negando su naturaleza x_x no digo que lo acepten, este personaje no fue creado para ser amado...
    Gracias a todos los que van comentando *-*~

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  10. jamás pensé decir esto (PORQUE AMABA NIÑERÍAS y obvio ahora adultez) PEEEROOO la historia dio un giro que no me gusta para nada, así que creo que haré una pausa en mi lectura hasta que me den ganas de leer de nuevo :/

    pero sigo leyendo VACACIONES <3 !!! :)))

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  11. Opino igual, creo que me cansé de leer capitulos casi identicos cada vez que subes, creo que por una vez en tu vida, como acto de agradecimiento a tus lectotas podrías arreglar un poco a Tom, no se si te diste cuenta, pero a casi nadie comenta este fic por lo mismo.

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  12. Pues yo no creo que tengas que cambiar nada si no quieres o si no es tu idea para esta historia. A mí tampoco me gusta Tom, pero que hacer, así es la vida y yo decido seguir leyendo, no tienes que cambiar la historia del fic como agradecimiento a nadie y si nos les gusta tan fácil como no seguir leyendo pero sin de los chantajes de parte de las lectoras para cambiar al personaje.

    Yo te apoyo aunque igualmente me disgusta la actitud de Tom y te pediría que continuaras con la historia original :D

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  13. Gracias por los demás que comentaron *-* y sobre las críticas, pues el fic tiene una razón de ser.
    Subiré capítulo pronto<3

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  14. A mi me gusto, es muy realista. Lástima que no tiene final

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