jueves, 25 de septiembre de 2014

Minino~ 39

Hola a todos *-*~ les traigo otro capítulo más de este fic, espero les guste :3 se viene el desenlace final. Gracias a quienes aún lo siguen y comentan, es importante para mí<3
En la habitación principal de la mansión de Hamburgo, Mike Furst lucía muy estresado y enfadado. 

Estaba mirando por la enorme ventana, estando en su balcón, observaba a los lejos las instalaciones construidas para los nuevos laboratorios que pronto estarían en funcionamiento para traer a la vida más híbridos. Había soñado con una sociedad numerosa de seres a su disposición, había invertido varios millones de euros en el proyecto y ahora parecía que todo se podía ir abajo solo por uno… un insignificante ser que se creía libre. 

Dentro de sí comenzó a odiar a Simone, la madre que había concebido a Bill, nunca debió permitirlo, debió haber matado al científico Lucas mucho antes de que se atreva a sacar de sus instalaciones al proyecto Macky. 

Se abrochó la camisa y encendió un cigarrillo, debía pensar en algo antes de que todo su plan se viniera abajo… quizá renunciar a Bill sería una buena idea, pero…

Volteó a verlo y se adentró en la habitación.

Bill dormía plácidamente en su enorme cama, estaba semi desnudo y tenía un suero de medicinas. Lucia pálido y mal nutrido, pero Furst no sentía pena, todo lo contrario, aún seguía furioso. 

Bill frunció el ceño, aun dormido y luego se mordió el labio gimiendo despacio, dándose la vuelta en la cama, moviendo el brazo que tenía la ajuga con el suero. Furst trató de ayudarlo y Bill comenzó a ronronear en su sueño, la cola se irguió en el aire y movía su brazo que le dolía por la ajuga, Furst debía llamar un médico antes que se quitara el suero por sus movimientos.

—Hum… Tom… —gimió de placer y Furst le dio una palmada fuerte en la espalda que no logró despertarlo, pero sí tensionarlo.

Se percató que estaba soñando… le pareció muy raro porque sabía que soñaba en un mundo supuestamente diferente a la realidad, pero cómo así mencionó ese odioso nombre. No lo sabía.

*

—Hum… Tom —jadeó cuando el abrazo se hizo excitante por las caricias en su espalda.

Se miraron a los ojos y Tom se preguntó si alguna vez podría recordar de dónde venían esos hermosos ojos celestes y gatunos que lo miraban con amor.

“Tom” llamó una voz en el ambiente y Tom abrió los ojos sorprendido.

—Te irás… —dijo Bill con angustia y luego reconoció la voz cuando la volvió a escuchar—. ¡Papá!

—¿Papá? —Bill lo miraba con asombro.

—Te irás, pero promete que volverás… yo te veré aquí, te estaré esperando en el mundo de los sueños…

—Aún sigo aquí…

—Estás por despertar.

“¡Tom, dónde andas!”

Bill vio cómo Tom se desvanecía en segundos… y desapareció. 

Cayó de rodillas en el suelo de hojas y sintió frió. Otra vez la tristeza le había embargado, pero pensó en Tom, en que estaba vivo de alguna manera y que estaba ahí, conectado en el mundo de los hombres gatos, en el mundo de los sueños y eso le dio muchas esperanzas. Aun no podía despertar pues de seguro su cuerpo estaría débil, pero sabía que Tom despertaría y vería a Georg, esperaba volviera a dormir y supiera quién era él realmente… solo así se atrevería a besarlo, moría de ganas porque eso pasara, recordar cómo eran y sabían los labios de Tom, cómo era sentirse amado era lo que más deseaba en esos momentos. 

*

Tom abrió los ojos por los insistentes golpes en su puerta, podía oírlos más alto de lo normal y lo aturdían un poco. 

Saltó hacía abajo y cayó de pie sin mayor problema, corrió rápido hacía la puerta y la abrió.

A su frente estaba un joven de cabello largo, atlético, serio, parecía molesto y a Tom no le pareció nada atractivo, no de la forma en como los hombres gatos sí. Tom aún creía que tenía las orejas de gato de su sueño y llevó ambas manos a la cabeza para ocultarlas, percatándose de que no tenía nada.

—¡Estamos desesperados, Tom! Simone está al borde de la locura, dijiste que buscarías a Bill y no das señales, ¿sabes algo? Es importante…

—¿Bill? El minino… ¿Tú quién eres? —La reacción de Georg fue de mucha sorpresa, podía ver a Tom muy confundido. Estaba en la oscuridad de su casa, lucía extraño, como descuidado y Georg pasó empujando a Tom.

—Sé que estás afectado, lo sé, todos lo estamos, quizá tú también estés sufriendo una crisis por la desaparición de Bill.

—Yo lo vi, al jovencito lindo, lo vi…

—¿Dónde lo viste? —lo tomó del cuello—. ¿Dónde está?

—No me vas a creer pero él está en mis sueños…

—¿Estás demente?

—No lo sé, quizá sí, estos días han sido difícil, jodidamente difíciles… desperté así, como esto… —se mostró con ambas manos, señalándose y Georg no lo entendía.

—¿Enloqueciste?

—Quizá. No recuerdo quien soy, no sé si siempre fue así… tengo unas orejas y colita de gato, pero ahora no las veo…

—Estás hablando incoherencias, ¿qué ha pasado? ¿Qué te han hecho?

—No lo sé… —dijo Tom bajando la cabeza y Georg lo soltó—. Dime quién soy, dime qué es lo que debería decirte. —Los dos hombres se miraron a los ojos y Georg llevó ambas manos a su boca pues podía ver los ojos de Tom brillar en la oscuridad—. Por favor, no me temas… también tengo colmillos pero no soy un vampiro. —Caminó hacia el interruptor de la luz y la encendió. Solo así Georg se tranquilizó.

—Pero qué mierda te ha pasado… Tom, tú eres de la familia, eres el novio de mi hijo Bill… —Los ojos de Tom se abrieron más de la cuenta, era el novio de ese hermoso ser de ojos celestes, labios rojizos, mirada felina, orejas y colita de gato; se quedó sorprendido—. Bill desapareció, ¿lo sabes? Tu idea fue irnos a América para escapar de esa especie de mafia que perseguía a Bill por ser lo que es… un hombre gato. Todos merecemos una vida normal ¿sabes?, mi hijo no pidió venir a este mundo con esas cualidades extrañas, él es un jovencito, que mientras viva poco en este mundo, merece vivir bien.

—Soñé con él recientemente… estaba muy triste, se sorprendió de verme, fue como si viera un… un fantasma… lo vi tan hermoso, como si siempre lo hubiera estado buscando, me sentí enamorado de él, pero no supe que era mío… que era mi novio, de haberlo sabido le hubiera consolado de otra manera.

—Lo que dices tiene poca lógica. Bill era de soñar cosas muy raras, pero el hecho que lo hayas soñado tú sólo me da a entender que tu mente te quería hacer recordar a tu novio. Aun no entiendo cómo es que no recuerdas nada, ¿qué te ha pasado? —Tom lo miró serio y suspiró.

—Es algo que no sé si me creerás. —Bajó la cabeza y Georg puso una mano sobre su hombro.

—Necesito saberlo, la madre de Bill enloquecerá, ella es capaz de matarse si sabe que Bill nunca más regresará…

Tom lo vio con mucha preocupación, debía hacer algo por Bill, por todos en sí, y fue cuando por primera vez sintió esa energía extraña de vivir por alguien. Haría lo que fuera posible para encontrar a Bill otra vez.

*

Jared bostezaba una y otra vez, incluso se sentó en el pasillo, con la espalda apoyada a la puerta de la habitación de Furst, aguardando.

Misha estaba parada frente a la puerta, con ambas manos en la cintura, moviendo la cola de un lado al otro y las orejas, siguiendo sonidos a lo lejos. Tenía enromes ojeras y lucía estresa tanto que los pelos de su cola estaban erizados.

—No doy más… —bostezó Jared—. Iré a dormir… Furst no saldrá, Misha, ya sabes cómo es, a estas alturas ya habrá hecho suyo a Bill, a nuestro pesar, es algo que tarde o temprano pasaría… debemos resignarnos. —Misha lo miró con desaprobación.

—Creí que eras tú el más interesado de que eso no pasara, creí que le habías prometido a Bill escapar y mira ahora, Furst nos ha cambiado a los dos por él, Bill se convertirá en su favorito y nosotros qué, ¿te has puesto a pensar? —Jared suspiró cansado y bajó la cabeza.

—Estoy acostumbrado a ser el segundo… ser el tercero no me afectará… —A Misha se le aguaron los ojos, ella no estaba tan acostumbrada a eso, no al recordar a Hans Furst, el padre de Mike Furst, el que la trataba como a una hija y fue así como un recuerdo muy lejano llegó a su mente…

*

Misha tenía ocho años cuando Hans Furst le regaló una pecera de peces muy finos y de colores. A Misha se le hizo agua a la boca y quiso cazarlos, pero Hans le pegó suavemente en la mano evitando que Misha se los comiera.

—Hija, no, estos son tus mascotas, ¿entiendes? —Misha asintió—. Las niñas no comen peces, los cuidan.

—Papá… ¿crees que soy una niña y no una gata? —Furst se puso serio.

—¿Quién te ha dicho que eres una gata? —Se sentó en su cama y la jaló del brazo para sentarla en sus piernas.

—Mike… —dijo bajando la cabeza y sintió a Hans suspirar un poco molesto.

Hans tenía un heredero de su fortuna, su adorado hijo Mike Furst que en ese entonces era un niño mimado que odiaba a Misha, la veía como una rival y es que su padre la trataba de manera especial, la trataba como a una hija.

—Hija, no le hagas caso, Mike habla sin saber, el hecho de que tengas una cola y orejas como los felinos, no te hace una, ¿entiendes? Para mí eres mi hija, la única que tengo.

—¿La única? —preguntó con una sonrisa, comenzando a ronronear.

—Sí, mi princesa…

Misha sonrió emocionada. Se podría decir que ese fue uno de los recuerdos más hermosos de su niñez, pero nunca imaginó que al morir Hans Furst, a quien consideraba como un padre, su hijo Mike Furst la tomaría como mujer y se olvidara de todo lo que su padre le había prometido… una vida decente.

Misha recordó el funeral de su papá, apenas pudo asistir, vestida al mínimo detalle para que no se le viera ni las orejas ni la cola. Ni pudo llorar, ni acercarse al ataúd, todos se lo prohibían, desde que su padre murió, Mike Furst comenzó a controlarlo todo, incluyendo su vida.

Misha entró a su habitación esa noche y se devoró todos los peces del acuario que su papá le había regalado. 

—No, no soy más una señorita como tú decías, papá… —decía entre lágrimas, cazando a cada uno de sus finos peces y devorándolos sin piedad—… Soy una gata… una gata sin hogar…

*

Jared comenzó a dormitar y Misha se ofuscó de eso. Ella no se movería de la puerta.

—¡Nuestro padre estaría en contra de esto! —gritó hacia la puerta, sabía que tocaba uno de los temas más sensibles para Mike, la mención de “nuestro padre”, podía enojarlo en sobremanera—. ¿Me has escuchado? Hans Furst estaría en contra de lo que estás haciendo, él jamás hubiera permitido que… —Se cayó al ver que la puerta de abrió de manera violenta.

Todos los sirvientes, más Peter, se pusieron en alerta. Mike Furst había salido, semi desnudo, con cigarro en mano, no se inmutó ni un poco, acercándose a Misha le dio una bofetada que la hizo caer sobre Jared quien despertó asustado. 

—Misha… —se levantó Jared a socorrerla, y luego vio a Furst—. ¿Se puede saber qué te pasa?

—¡No vuelvas a mencionar a mi padre como tuyo! ¿Te queda claro? —Misha lloraba en los brazos de su igual y Peter se acercó para levantarlos—. ¡Quiero que se larguen, a mí nadie me dice qué hacer!

—Señor, con todo respeto, el médico tiene algunas indicaciones, debe revisar a Macky —dijo Peter, ayudando a Misha a ponerse en pie junto con Jared.

Furst, muy ofuscado, abrió más la puerta. —Que pase, que lo revise y lo deje descansar. Alista mi movilidad, iré a dar un paseo, pero no dejes a Misha y Jared entrar donde Macky, está prohibido que se hablen. 

Los dos hombres gatos, lo miraron con desaprobación, pero ninguno podía reclamar.

Jared fue a la habitación se Misha, no quería separarse de ella. —Tranquila… —susurraba, Misha no dejaba de llorar.

—Es que… es que hoy recordé lo feliz que era cuando mi papá estaba vivo… Jared, somos esclavos, ¿entiendes ese concepto? —Jared suspiró bajando las orejas.

—Siempre lo fuimos…

—No, no… tú sí, pero yo… en un inicio no lo fui, Hans no quería que esto pasara… todo es culpa de Mike Furst, estoy segura de eso.

—Pero Misha, amamos a Furst —Misha lo miró con pena. 

—¿Crees que está bien amar a quien hace tanto daño? —Jared dejó de verla a los ojos, él no sabía cómo contestar eso. 

—Estamos acostumbrados a ese daño, ¿no crees? No encuentro una salida… salvo dormir ahora, debemos saber cómo está Bill, debe estar triste…

Misha suspiró y se recostó en la cama. Jared se recostó en su vientre, cerca de su pecho y comenzó a ronronear, contagiando a Misha de esa sensación agradable que era dormir.

*

Bill caminaba buscando al ave Pety Rojo, pero antes de encontrarlo, halló en el camino boscoso a Misha y Jared. 

Bill corrió y abrazó a Misha y Jared con desesperación. —¡Lo vi, lo vi, lo vi! Mi Tom vive o al menos existe otra vez. —Misha se sorprendió pero Jared no.

—Así que lo viste… —dijo Jared un poco dolido.

—Sí, existe aquí, quizá Basted me lo trajo, no lo sé, quizá, pero no quiero despertar, quiero quedarme aquí para siempre, la vida allá no es vida para mí, siento que no soportaré un día más.

—No sé qué decirte, Bill —dijo Misha—. Es decir, sabemos que Tom ha…

—Lo sé, pero lo vi, me mostró su cicatriz en el pecho, es él, solo que no me recuerda aún, pero cuando lo vuelva a ver le diré todo.

—Bien por ti —dijo Jared apenado, con las orejas decaídas y la cola también.

—Vamos, Jared, no te pongas así —dijo Bill acercándose a él, acariciando su mejilla.

—Te digo que ese Tom trató de ligar conmigo. —Bill frunció el ceño y se separó un poco de Jared.

—¿Qué dices?

—Bueno, lo vi una vez aquí, me asusté mucho y él comenzó a olerme y… ya sabes, quería follarme. —Bill se apenó mucho, no sabía cómo reaccionar, Misha le dio un manotazo en el hombro a Jared—. ¡Lo siento! Pero no le hice caso.

—¡No me dijiste nada!

—Quizá no hubo tiempo, lo lamento. 

Bill le dio la espalda a ambos y Misha se le aceró y puso una mano en su hombro. —Bill, debemos hacer que vuelvas con los tuyos, esto se está saliendo más de control. —Bill se dio la vuelta y la encaró.

—Dime qué me está haciendo… dime… aunque duela. —Se abrazó a sí mismo imaginando muchas cosas.

—Aún estás siendo medicado, Furst saldrá a pasear un rato, quizá podamos aprovechar algo, aunque es muy arriesgado.

Bill los abrazó con desesperación. —Misha, Jared; si logro salir, los sacaré a ustedes también, aunque no me entiendan, merecemos ser libres. Debemos estar unidos, solo somos nosotros tres en este mundo.

—Solo somos tres —repitió Misha.

—Es cierto, debemos unirnos —dijo Jared buscando con su cola, la cola de los otros dos.

*

En la casa de Tom, Georg no entendía la insistencia de éste por querer dormir.

—¿Estás loco? Mejor me voy.

—No, no, te lo juro, no estoy loco, aunque quizá, pero verás que te traigo pruebas de él, solo debo dormir, solo eso. Cuéntame un cuento, no sé, prepárame un mate de esos relajantes o… —se le ocurrió algo muy fuera de lógica, pero sintió que funcionaría—. Acaricia mi espalda.

—¡Qué! Mejor me voy.

—¡No! Te juro que hablo enserio, no te vayas, espera a que despierte y te diré de Bill, te lo prometo. —Se recostó en la cama y se puso boca abajo. Georg se sentó a su lado y con mucha incomodidad, le dio palmaditas en la espalda—. Hum… eso es. Sí.

—¡Hey!

—Lo siento, lo siento; no diré nada. —Cerró los ojos y se relajó.

Georg no entendía muy bien lo que hacía, pero todo sea por noticias de Bill, quería creer que Tom le diría algo sobre su paradero y esperaría.

Tom se relajó mucho y logró dormir viendo como entraba en ese mundo de los sueños donde apareció con una cola y orejas esponjosas y plomas. 

Corrió por ese bosque y se detuvo cerca de la casa celeste… viendo a tres hombres gatos abrazados, en un pequeño círculo.

Se le erizó la cola al ver a Bill otra vez y ahora sabía que era su novio.

Al fin... aunque Tom no recuerda nada, al fin volverá a ver a Bill. ¿Qué hará Furst? ¿Qué harán los hombres gatos? ¿Qué hará Tom y Bill? Veremos :3 No olviden comentar *-*<3

8 comentarios:

  1. ¡Awww!
    Y Bill y Tom y todos asdfhllñlh *-*
    Tom ya sabe que es novio de Bill, ojalá vuelvan a estar juntos.
    Pobre Misha :( Odio al maldito de Furst -.-
    Espero todo ya empiece a tomar un buen rumbo.

    Síguela pronto, por favor.
    Un abrazo. ♡

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  2. Awww por fin Tom sabe algo y los va a ver, espero el final con ansias, ya lo siento venir...

    Estoy muy emocionada, es de los fics que añoraba un final y se lo estas dando, estoy muy agradecida :3

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  3. Tom ya sabe que Bill es su novio gracias a que Georg apareció justo a tiempo, ahora muero por saber que van hacer, para salir libres.

    Espero el proximo, saludos c:

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  4. Soy tu fan esta genial el fic por fis continual ha esta super mas cuando tom recuerde quien es y Bill y bill misha y jared escapen sera trajico para furst hay algun face para ubicarte ...

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  5. gracias a todos por comentar, me emociona mucho *-* tengo mi Face aquí, al lado en mi blog hay un link, también de ask, también hay un chat donde suelo responder seguido cualquier duda
    <3 pronto habrá capítulo, no se lo pueden perder :3

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  6. Woow�� obsesionada como no tenes idea Pink Girl. Me encanta como escribes, tienes un enorme talento��������. Solo que ya sube el otro capítulo, no? No seas mala xD
    Morí cuando murió Tom, vivo todo lo que sienten y ya quiero ver que pasa después��

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  7. Woo tu fic es genial... lo lei todo en dos días jeje... espero y no tardes con los demas... la trama es envolvente y original... espero y bil y tom por fin puedan estar juntos el minino a pasado por mucho :(

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