Una esperanza - 14

Aun trabajando, pero dejando fics programados n_n espero les guste este capítulo, creo uqe explica algunas cosas de Louis... y les gustará como termina. *-* Los extraño!

—Podemos ir a tu casa si quieres —dijo Harry cuando habían caminado cuadras y cuadras riendo de cualquier cosa.

—No, creo que más cerca está la tuya.

—Es tan tarde, estos lugares son un poco peligrosos —dijo un Harry un poco asustado, Louis rió.

—Eres tan maricón; ah, es cierto, lo eres.

—¡Hey!

—Solo digo la verdad.

—El hecho que sea gay no me hace maricón, ¿sabes quiénes son los maricones? Los chicos como Liam y oh sorpresa, eres de andar con él. —Louis lo miró serio.

—Es un buen amigo.

—Sí claro, un amigo que te manda a golpear gente, a hacer bullying a otros sólo por diversión.

—Ya, sé que es malo a veces, pero… —calló no sabiendo cómo explicarle eso a Harry.

—¿Pero? No hay algo que lo justifique.

—Si lo hay, pero a ti no te lo diré. —Harry se ofendió un poco, pero lo dejó pasar.

La zona popular, llena de grafitis y algunos indigentes, lograba asustar a Harry, pero Louis parecía cómodo con eso. En realidad la casa de Louis estaba más cerca que la de Harry, pero no se lo diría, aun no le tenía la suficiente confianza. A Harry no le parecía tan tarde, aunque lo era, simplemente no quería irse a casa y separarse de Louis, lo que había pasado, el pequeño beso, le había regresado las pequeñas esperanzas que tenía para con Louis.

—Hum, creo que estamos cerca a mi casa —dijo Louis—. Debo irme.

—Oh… —Harry lo había seguido cual cordero sin decir nada y ahora se encontraba en la zona peligrosa de la ciudad. Se angustió un poco, al parecer Louis lo dejaría simplemente—. Bueno… entonces nos vemos en la escuela —sonrió fingido.

—Sí.

—Eh… ya que es tu barrio, ¿me dices dónde tomar el tren? —Louis sonrió con malicia.

—Venga ya, vamos a mi casa, la estación está a dos cuadras más allá. —Harry le sonrió satisfecho, él iría donde Louis iría.

Y así fue, caminaron por las calles oscuras y Harry se ponía a pensar cómo hacía Louis para pagarse la escuela privada donde estudiaban, parecía no ser de una familia adinerada, pero eso le extrañó porque cuando eran niños e iba Louis a su casa, su mamá solía vestirse muy elegante y tener varias joyas en manos y cuello, hasta podía afirmar que era de más clase social que la de su mamá. Aunque trataba de recordar a la mamá de Louis, al lado de su mamá Anne era ya una señora, Harry siempre había visto a su mamá como demasiado joven al lado de la mamás de otras personas y es que ella lo tuvo muy joven, casi adolescente y ahora Harry sabía que Louis era el menor de cinco hermanos, de seguro su mamá ya tenía cierta edad.

Vio que Louis se detuvo en la esquina de una calle y miró serio a Harry.

—Mejor te dejo en la estación de tren.

—¿Pasa algo? —podía ver que sí, Louis estaba entre asustado y molesto, una mezcla rara que podía darse cuenta con facilidad. Miraba hacia el segundo piso de una casita con jardín descuidado en la parte de afuera.

—No, nada.

—Louis… —Tomó su brazo, no era la primera vez que notaba esa expresión y que le ocultaba cosas—. Confía en mí.

—No pasa nada, entiende — insistió y Harry se apenó—. Vamos a la estación. —Harry, sin decir nada, lo siguió.

Otra vez el silencio reinó entre los dos. Louis no podía dejar de pensar en que su hogar era un infierno. Su mamá no era normal, todo se había arruinado desde que su papá se fue de casa y él no quería permanecer ahí por mucho tiempo.

No supo cómo, caminando sin rumbo junto a Harry, llegaría a su casa. Casi podía decirse que habían estado vagando una hora en plena noche, pero Harry parecía estar lejos de estar cansado, aun lo seguía sin rechistar y eso en cierta forma le gustaba a Louis, podía ver en Harry una persona especial.

Llegaron a la estación del tren y Louis quiso probar algo con Harry, no sabía por qué lo hacía, pero al momento en que el último tren se estacionó para recoger a los pasajeros, Louis tomó su brazo y lo miró a los ojos.

—Llévame contigo —pidió sólo para saber lo que Harry haría. Y el de cabello rizado, tomó su mano, sin dudar, y lo jaló hacia el tren y así Louis terminó sentado al lado de un emocionado Harry.

—No sé qué está pasando, Louis —lo miró serio—. Estoy pensando que escapas de algo.

—Y si es así, ¿qué tiene? Todos tenemos problemas. —Harry asintió.

—¿Sabes? Si confiaras más en mí quizá podría ayudarte.

—No necesito una ayuda, Harry, lo que me pasa no tiene una solución posible, es sólo eso.

—Soy bueno escuchando. —Louis lo miró con interés, sin embargo, no dijo nada más, se quedó mirando la ventana del tren, a todas esas personas, pesando si había alguien en el mundo que vivía lo mismo que él y de seguro que no, él pensaba que era el único.

*

Llegaron a la casa de Harry y éste vio la hora, era más de las doce de la noche, de seguro su mamá dormía, y así era, la señora Anne había salido con su pretendiente y había regresado a casa sigilosa, para que Harry no se diera cuenta y se había encerrado en su habitación para no levantar sospechas.

Harry se preocupó un poco y era por el extraño interés de Louis de ir a su casa y el beso que anteriormente le había dado, ninguno había dicho nada, ni siquiera él mismo se había atrevido a reclamarle o pedirle explicaciones, ¿qué eran? ¿Sólo amigos? La primera vez que Louis lo besó Harry había llegado a la conclusión de que Louis quería dañarle el labio herido, pero ahora, luego de reclamarle y decirle que el experimento de querer cambiar sus gustos por las mujeres no había funcionado, lo había besado, ¿qué significaba todo eso? ¿Acaso era una pequeña esperanza? ¿Acaso a Louis le gustaba tan siquiera un poquito Harry? No lo sabía, pero mientras más permanecía a su lado, más le gustaba Louis.

Subieron a su habitación y Harry llevó consigo lo que a Louis tanto le gustaba, una bandeja de galletas caseras.

—¿Será que ahora sí pueda quitarme este atuendo de hombre mujeriego? —pidió Harry ya en su habitación y Louis rió ante eso.

—Deberías pensar más en vestirte así, luces… luces bien —sonrió mirándolo con picardía y las mejillas de Harry se colorearon para así irse al cuarto de ropero que tenía y cambiarse de ropa por algo más cómodo, un suéter gris y unos pantaloncillos de algodón color negros.

Cuando salió de su ropero, se percató de que Louis se había acomodado en su cama y abrazaba su almohada, descansado con una sonrisa en sus labios. No dejaba de verlo y eso aumentó su nerviosismo, no sabiendo si debía ir hacia su cama o hacia el escritorio.

—Ven aquí —llamó Louis y Harry tragó saliva ante esa petición. Era rara, no era como otras veces y eso lo asustó, era más bien una invitación cómplice hacia algo más, pero a la vez, trataba de no ser mal pensado, de seguro no era para algo más, de seguro era para… para quien sabe, conversar como amigos.

Harry se hacía muchas preguntas en su mente, ¿es normal dos amigos conversar en una cama? De seguro es algo normal entre mujeres, suelen tener pijamadas, pero los varones jamás hacen eso.

Pero Harry no era el único que se cuestionaba eso. Louis se sentía muy extraño pidiéndole que se le acercara, además de eso, el beso que le había dado, sabía que era un grave error, pero ésta vez se lamentó menos que la anterior y cuando probó a Harry diciéndole que se lo llevara a su casa, aún más, se sintió como pocas veces en su vida, sintió que le importaba a alguien. Al menos a alguien.

Vio el nerviosismo de Harry, sabía que estaba pidiendo algo raro, algo atrevido y que Harry podría interpretarlo como una invitación a algo más, pero ¿acaso no era eso? Por más que pensaba en no hacerle algo, sentía que quería vivir algo así, al menos el hoy y luego mañana arrepentirse, eso era la excusa. Y fue cuando vio a Harry acercarse y sentarse al borde de su propia cama, Louis tomó su brazo con cierto temor y sintió a Harry temblar y verlo con nerviosismo. 

—Louis —dijo en un susurro, era una petición de explicación, pero Louis no dijo nada, solo lo jaló casi de manera brusca y Harry terminó recostado a su lado, al borde de su cama, mirándolo frente a frente.

Harry cerró los ojos, rojo de vergüenza por la cercanía y luego suspiró hondo, alzando una mano acarició los cabellos de Louis quien lo miraba a detalle, quieto, sin decir nada.

Y esta vez fue Harry quien se acercó lento y lo besó. De manera suave, casi temblando, sus labios rozaron los de Louis y continuó así, tímido, esperando el empujón de Louis, o que saliera de su cama y escapara, que lo golpeara después, o quién sabe qué más, pero no pasó nada, Louis había aceptado su beso y una mano fue hacia su cintura para abrazarlo por ahí, pegando más su cuerpo y abriendo Harry la boca, se dejó besar más, fue cuando Louis tomó el control de todo.

Los pies de Harry se contrajeron y su estómago se hundió de tanto placer que sintió. Se sintió como estar en un sueño, con Louis abrazándolo y besándolo, no quería separarse, quería estar así por mucho… y fue cuando volvió a sentir una esperanza…

Se  besaron *-* ¿qué piensan? ¿Qué creen que pasará? Espero comenten u_u lamento no poder responder todo a tiempo, es que casi no tengo tiempo u_u