Póster - 63

Hola a todos n_n aquí un capítulo más de este fic para Scotty *-* espero lo disfrutes. ¡Los quiero!

Bill lo abrazó por detrás mientras Tom dormitaba.

—Pasado mañana regresaremos —le dijo, ya había comprado sus pasajes por internet.

El de rastas cerró los ojos algo apenado, no quiso decirle que eso era lo que menos quería.

Bill se levantó de la cama sabiendo que Tom dormiría. Caminó hacia su laptop, quería estar en contacto con el mundo antes de regresar. Debía ser valiente y planear cómo enfrentar todo el caos originado al otro lado del mundo… qué difícil sería.

Se angustió y todo su cuerpo se puso frío al ver una foto de Georg con una mujer pelirroja saliendo de una discoteca de Hamburgo, un paparazzi había tomado la foto y era la noticia reciente relacionada con él. Algo no estaba bien en esa foto, él reconoció a la mujer, una modelo importante de Alemania, una tal Sara. No era una groupie con las que solía acostarse Georg, porque Bill sabía su debilidad por las mujeres fáciles y se lo permitía siempre y cuando no fuese algo serio.

Tomó su celular y llamó a Georg.

—Aló, Bill…

—Aló —habló serio.

—¿Estás por regresar? Aquí pasan muchas cosas. Te extraño.

—Ya veo…

—¿Pasa algo, mi Diva?

—Sí, pasa que me entero de cosas. —Georg carraspeó un poco.

—Esas fotos son mal intencionadas, además fue consejo de David Jost como para entretener a los medios, ya sabes, no tienes por qué reaccionar así.

—Pensé que vendrías en estos días. —Hubo un silencio que hizo al pelinegro fruncir el entrecejo.

—Tengo mi boleto en las manos.

—No es necesario, ya no deseo que estés aquí.

—Vamos, Bill. Puedo ir a traerte.

—No.

—Creo que mejor hablamos en persona…

—Estoy con Tom.

—¿Qué? ¿Quién Tom?

—El chico del póster.

—¿Qué? ¿Estás tramando algo? Es ridículo lo que dices, no me gusta que te acerques a ese sujeto, sabes muy bien cómo son los fanáticos, Bill.

—Lo sé, sé cómo es él, lo he conocido en estas semanas… —Georg gruñó y Bill sonrió de lado.

—Espérame allá. Y será mejor que saques a ese sujeto del búngalo, no sé cómo pudiste hacerme esto a estas alturas sin explicarme nada, comienzo a sentirme engañado.

—Como me siento yo, estamos igual.

—Es una mujer, una modelo Bill, no es serio; además, ¿viste que subimos de popularidad? Ya nadie habla de tu desaparición, sólo hablan de las fotos por un tiempo, ¿no es lo que quieres? Esto lo planificamos con Jost, ya te expliqué todo y mejor si lo hablamos en persona.

—No quiero que vengas, ya no quiero nada.

—Bill, joder, deja de hablarme en ese tono.

—¡Te hablo como me da la gana!

—De acuerdo, voy a colgar, pero hablaremos de esto cuando nos veamos. Te quiero…

Los labios de Bill temblaron sintiéndose muy mal, ¿le quería? Nada de esto estaría pasando si le quisiera, al parecer no. Y fue él quien colgó antes de Georg.

Vio detrás de él, Tom estaba sentado en la cama mirándole en la oscuridad.

—¿No puedes dormir?

—Un grito tuyo me despertó y quise saber si estabas bien. Al parecer hablabas con tu novio.

—No quiero hablar de eso.

—Está bien. ¿Qué hora es?

—Creo que más de las doce… ¿Hablaste con mi otro lado?

—Un poco.

—¿Qué te dijo? —preguntó serio, acercándose a Tom y se sentó a su lado.

—Que me ama… —Bill agachó la cabeza—. ¿Pasa algo?

—No, nada.

—Sí pasa, deja de mentirme, por única vez en tu vida dime la verdad, además estamos por regresar, qué más da. —Bill se encogió de hombros y Tom suspiró un poco.

—Él es parte de mí, ya, dije todo.

Se levantó de la cama y Tom le detuvo de la muñeca. —No te vayas, dime más, ¿cómo que lo conoces? —Bill suspiró y se sentó en la cama otra vez.

—Lo he visto una vez por el póster, no sé cómo pasó pero lo vi y hablé con él, no es otro ser, soy yo en otro estado simplemente.

—Pero él no recuerda nada, ¿verdad?

—Sí recuerda. —Tom se quedó pensativo por un instante, Bill quiso callar pero luego se animó a confesarle otro dato más—.Y recuerdo también lo que él ha vivido.

—¿Qué? No entiendo.

—Recuerdo cosas, como si las hubiera soñado, esto es reciente… Recuerdo la película que viste ayer con él y recuerdo que le abrazaste o era yo, me abrazaste y también recuerdo el trato que hiciste con él. —Frunció el ceño y Tom abrió los ojos desmesuradamente.

—¿Qué? —El de rastas se sintió descubierto.

—Si tanto quieres ese póster y verme ir y venir de él, quédatelo, ¿para qué pelear por algo que no tiene solución? Es todo tuyo, empácalo entre tus cosas.

—Espera… yo… no sé qué decirte, estoy sorprendido con lo que me dices y a la vez… desesperado.

—¿Desesperado? —lo miró a los ojos en la noche, la luz de la luna entraba por las enormes ventanas.

—Todo lo que ha pasado en estos días Bill, todo lo que me has mostrado sólo me tiene más atado a ti. —Algo en el pecho de Bill dolió y se mordió el labio esquivando su mirada.

—Debemos dejar ir esto. Por el bien de ambos. —Tom asintió bajando la cabeza, ¿para qué decirle lo que sentía? Ya todo estaba dicho, debían dejarlo pasar simplemente.

—De acuerdo. Y el póster es tuyo, ya no lo quiero.

—¿De verdad? —preguntó Bill con desilusión en su voz.

—Sí, así no tendrás problemas ya que recuerdas como en sueños lo que hace el otro Bill, podrás controlarlo todo muy bien.

—Tienes razón —contestó desganado—. Dejemos las malas vibras y démosle buena cara al asunto. —Le codeó y luego fingió una sonrisa, pero Tom no podía fingir como él, se quedó serio, sentado en la cama viéndole caminar por la habitación, alistaría una maleta—. Pasado mañana salimos al medio día, así que mañana es nuestro último día, ¿deseas algo? Podemos ir a bucear o a pasear en las motos de agua, todo lo que quieras estará a mi cuenta.

Tom sólo escuchaba todo, no quería pedir alguna cosa, sólo quería estar a su lado.

—Ve tú, a mí me da igual.

Bill suspiró bajando la cabeza, Tom no podía disimular tan bien como él sus molestias.

Las cosas se enfrían justo cuando están por salir, pero despuden >:D aun hay cosas por acontecer jojojo. Comentarios, sugerencias y críticas son bienvenidas. Gracias por leer *-*