miércoles, 24 de abril de 2013

Vacaciones - 16

Hola a todos *-* lamento tardar, pero es mejor acostumbrarse a que tarde en actualizar, mi tiempo ha cambiado mucho. De todas formas gracias por seguir n_n este capítulo se llama "Hechizos y maldiciones".
Por Tom:

Mi hermano iba en ese caballo tan rápido, alejándose de mi vista y mi desesperación aumentaba.

La chica esta, Ximena, que tan pesada me caía, no dejaba de gritarme que regresara con ella, pobre ilusa. No era de tratar mal a una dama, no era mi forma de ser decirle que no disfrutaba de su compañía, por eso no le dije nada, sólo le seguía la corriente por cortesía, porque no iba conmigo el no ser atento con una chica. Ella era muy linda, en otro tiempo, o sea, antes de venir aquí, hace ratos hubiera conseguido con ella lo que mi cuerpo me pedía.

Pero ahora las cosas eran distintas.

Al único que quería era a Bill. Así que no sólo se alejaba de mi lado mi hermano gemelo, sino también mi novio y mi razón de vivir.

Galopé velozmente gritando su nombre pero lo perdí de vista, no sé dónde se había ido, los árboles me impidieron la visión, él se había salido del camino y se adentró en el bosque.

Un bosque otra vez…

—¡Tom! —Me alcanzó Ximena—. Ya regresará, Nube es así de loco a veces, él sabe regresar al establo no te preocupes.

—No, debo ir por mi hermano, él debe estar asustado, debo seguir. —Ordené al caballo movilizarse y así lo hizo, ella vino a mi tras.

—Aish… que posesivo con tu hermano, por eso es así de quejica. —Me irritó su comentario, la niña me estaba probando.

—Es mi único hermano, no es quejica.

—Siempre está quejándose contigo “no quiero esto”, “Tom ayúdame” —Imitó a mi hermano con una voz horrible, él no hablaba así—. Eso es ser quejica.

—Sabes, basta, si no me vas a ayudar a buscarlo, no hables de él.

—Bueno, pero de todas maneras es raro. —Ella sonó seria—. Hubo una vez un incidente algo vergonzoso. —La miré—. Sí, de seguro te habrán dicho.

—No sé a qué te refieres, nadie me ha dicho nada ¿Decirme qué?

—No, es muy vergonzoso, ustedes no son así. —Bien, ya todo esas miradas de asco, todo eso empezó a hartarme… quería saberlo todo de una buena vez.

—Dilo, anda, ¿qué pasa con todos ustedes? ¿Qué es ese incidente vergonzoso? —Creía poder adivinarlo y la idea no me gustaba, me sentía descubierto.

—Pues, la maldición llegó cuando intentaron ir contra la naturaleza… actos contranatura, en el pueblo aledaño… —Ella enrojeció como si hubiese dicho algo terrible. “Contra la naturaleza…”

—¿Actos contranatura?

—Sí, de los más asquerosos, no quiero hablar de eso… así que deja de parecer paranoico con tu hermano… es… tu hermano. —La miré extrañado ¿Qué decía? Debía hablar claro, vamos que estamos en el sigo XXI ya nada es tabú ahora y ella me venía con cosas así.

—¿Qué es lo asqueroso? Vamos dilo, quiero saber de qué se trata todo este misterio que ya me tiene harto.

—¿No vas por tu hermano?

—Vamos Ximena, quiero saber. —Aunque prácticamente ya lo sabía.

—Bueno, no sé si has oído de los hermanos Dan y Dean.

—No, no sé quiénes son.

—Ellos… ellos fueron contra la naturaleza una vez, haciendo actos impuros…

—¿Qué tiene? Es su vida, ¿no?

—No, no entiendes, ellos se relacionaron entre ellos, es asqueroso.

—Bueno, es su vida, no tiene por qué ser asqueroso, vamos, abre tu mente. —Me puse serio, su mentalidad me sacó de mis casillas… en cierta forma me sentí juzgado, intimidado, descubierto.

—No es cosa de abrir la mente, causaron mucho daño.

—Pero por qué, si sólo se relacionaron entre ellos.

—Al pueblo le pasó algo horrible por su causa, ellos trajeron la maldición y ahora no puede ser habitado… se ha convertido en un pueblo fantasma, la gente se los advirtió. —Lo cierto es que su relato me causó risa, porque ella lo contaba como si fuese una gran verdad, algo muy fuerte, sólo eran dos hermanos enamorados ¿Qué tenía eso de extraordinario para mí? Ahora entendía por qué la gente como el señor de bar y el señor de la cabaña reaccionaron así, por una estúpida leyenda.

—Jajaja, es lo más ridículo que he oído, y ¿tanto por eso? por dios, es que es estúpido creer en cosas así. —Ella me miró sorprendida, me frunció el ceño y puso una mueca de indignación.

—No sabes lo que dices, lo que pasó fue horrible.

—Bueno, no me interesa, ahora sé por qué tanto misterio con eso, me parece tan estúpido. Debo ir por mi hermano, y si quieres saber, pues lo quiero demasiado, allá tú lo que pienses, es sólo amor, no hay nada de malo en eso, me voy. —Ella no dijo nada, sólo se quedó ahí sobre su caballo mientras yo daba media vuelta rumbo al bosque a buscar a Bill, debía contarle toda esta tontería.

¿Sólo por ser hermanos? ¿Maldiciones sólo por amarse entre hermanos? Bah, que cosa más estúpida.

Por un instante recordé que yo tomaba a este lugar como maldito, como un lugar que me llevó a querer a Bill de otra manera. Sentí miedo, debo admitirlo, pero ya estábamos en esto, y no pensaba dar marcha atrás. Lo deseaba y quería como nunca antes lo quise y quise a alguien. ¿Por qué habrá pasado? Y da la casualidad de que él me ha correspondido, pues me lo ha dicho y demostrado muchas veces, ¿cómo ocurren este tipo de cosas así no más? Entonces empecé a creer en “Maldiciones” en cierta forma.

Algo no me gustó de todo eso, empecé a dudar de la realidad misma, me sentía como en un sueño, o que vivía una ilusión “Vamos Tom, es sólo una puta leyenda pueblerina, no es algo cierto”. En cierta forma valía la pena. Sonreí gustoso de sólo recordar la noche anterior, fui un poco más allá con él, casi fue mío del todo. Agité mi cabeza para borrar ese recuerdo por esta vez, pues debía concentrarme en buscar a Bill.

—Vamos Tormenta, debemos buscar a Bill —dije al caballo.

El sendero se volvió pedregoso, el caballo galopó un poco más rápido llevándome por ese sendero a algún lugar. Traté de concentrarme en mi hermano, tal vez, sólo tal vez, pudiera conectarme mentalmente con él, no lo sabía, pero al menos lo intentaría.


Por Bill:

¡Maldición! El caballo seguía y seguía y mientras pensaba, quise soltarme de él, tal vez era la única manera de parar, pero ¿y si me hacía daño? No quería caer en todo este camino de piedras.

—¡TOM! —Volví a gritar con la esperanza de que pueda oírme, pero nada, no había ningún ruido, silencio total en aquel lugar, ninguna casa, nada de civilización, sólo el camino de piedra y árboles, el cielo, el caballo y yo.

Llegamos a una especie de laguna entre los árboles, y el caballo se detuvo a tomar agua.

—Oh, Nube, eso querías… ¡hubieras avisado, tenía una botella de agua! ¡Caballo estúpido! – Me bajé de él —¡Me hiciste perder! ¡Aish! —Pateé las plantas frustrado, ahora no sabía donde estaba y Nube tomaba agua tranquilamente.

Este lugar era el más silencioso lugar en donde había estado nunca… sólo algunos pájaros cantaban y la brisa del agua sonaba, había mucha tranquilidad. Pero yo estaba ofuscado, perdido, y cansado. Tenía sed, tomé la botella que tenía el caballo, bebí de ella con desesperación. Y me senté cerca de Nube a esperar a Tom. Espero que me esté buscando.

—¡TOOOOM! —Grité y algunas aves volaron de los árboles asustadas—. Lo siento jeje. —El caballo se agitó un poco moviendo las orejas y giró para verme—. ¡Qué me miras, Nube! ¡Caballo tonto, mira donde estamos, por tu culpa! —Movió la cola divertido y empezó a relinchar, movió las patitas como queriendo correr, entonces lo oí, pasos de caballo por el camino de piedra—. ¡TOM! —Grité y sí, sí era él porque su caballo se detuvo en el camino, salí a su encuentro desesperado, corriendo hacía él quien bajaba del caballo, también corrió hacia mí.

Nunca había sentido esa enorme felicidad como esta de ver de nuevo a mi hermano. Abrí los brazos grandemente y lo abracé con todas mis fuerzas.

—Tom, Tom, Tomi, Tom.

—Hola mi amor —me susurró—. Caballo estúpido que te alejó de mí. —Me separé de él por un instante sólo para darle un beso pequeño en sus labios, estaba feliz de verlo, muy feliz.

—¿Dónde estamos? – Le pregunté al ver todo ese lugar.

—Perdidos otra vez. —Me sonrió frescamente, pero me preocupé, es que él veía divertido a situaciones como esta, pero yo no.

—Debemos regresar y buscar el camino.

—Vamos Bill, ni bien te encuentro y tú ya quieres regresar, con Ximena seguro ¿Te gusta? —fruncí el ceño.

—¡¿Qué pregunta es esa?! Claro que no me gusta, es una igualada, fea, habladora, retrasada, estúpida, virola, es…

—¡Ya! Ya sé que no te cae, a mí tampoco.

—¿Sí? —Enarqué una ceja.

—Claro que no, como crees, si tú eres el único que me gusta. —Me sonrió tiernamente y caí derretido. Mi corazón se aceleró como si no hubiera sabido esa gran verdad, así era yo de emotivo.

—Tom. —Le sonreí y me tomó de la cintura pegándome a su cuerpo. Balanceamos un poco en el camino, como bailando, besó mis labios suavemente y me deshice en suspiros—. ¿Qué pasará con nosotros? —pregunté al separarnos, tenía su frente apoyada en la mía.

—No lo sé, sólo quiero amarte, sólo eso.

—Pero —me puse serio—, tú sólo piensas en mí como algo sexual. —Tenía que encararle eso, pues era verdad, no veía yo nada de romance ni nada de interés real en mí que no fuese tener mi trasero. Y yo quería sí, pero sabía que terminaría todo mal.

—Pero qué dices, yo no te veo solamente como algo sexual. —Su mirada era sincera, pero sus actitudes no… tenía una mano muy cerca de mi trasero.

—¿Y lo de anoche? Se supone… se supone que aún no te digo para ser novios… es, es mi culpa, lo sé, lo permití, lo quise, pero ¿si no hay quien te pare? Tú no paras, Tom, tú siempre quieres más.

—Más de ti, sí, quiero más.

Amaba que sea directo conmigo, que encare las cosas así. En parte me hacía sentir deseado, y que quizás, sólo quizás, esto funcionase y ambos podíamos ser más que hermanos.

Pero yo era complicado y también bastante inseguro. No es que creyera que nadie podría quererme, sólo que dudaba mucho de que las cosas funcionaran, y de sólo pensar en ser novio de una noche con mi propio hermano me ponía mal. Yo no quería una noche con él, quería una vida.

Estuvimos conversando de nuestros planes. Le dije que quisiera estar con él más “en serio” pero que tenía mis dudas, y esas dudas no las cambiaría así no más. Él dijo que intentaría hacerme cambiar de opinión. Veremos si puede.

Por otra parte, notaba cierta rareza en su mirada, como si pensara tanto en algo, como si no quisiera decirme algo. No sabría explicar qué gestos eran los que me hacían pensar eso. Creo que más que algo evidente era una sensación de algo.

Ambos decidimos tomar un baño en aquel lago, teníamos mucho calor, así que la idea era genial. Después regresaríamos por el camino a la hacienda esa, donde devolveríamos los caballos y regresaríamos a casa con el abuelo… habitaciones separadas. La idea me cayó muy, muy mal. Imaginar que hace casi dos semanas renegaba por eso, ahora quería estar mucho más cerca de Tom, más cerca de lo que antes podía imaginar.

Entramos en la laguna con sólo nuestra ropa interior, aunque el atrevido de Tom quiso quitarse todo, no se lo permití, demasiada tentación para mí.

—Bill —me llamó con un tonito especial. Yo permanecía a su lado, no muy cerca de él, estaba nervioso.

—Tom, por favor… yo no quiero —dije al adivinar sus intenciones, se mordía el labio insinuante… él quería hacerlo aquí y mis mejillas ardieron de sólo imaginarlo, los dos intimando en este lago pequeño—. Hay demasiada luz… yo…

—Tranquilo. —Se me acercó—. No es eso lo que quiero… digo, lo prioritario ahora, aunque viéndote así, Bill estás demasiado insinuante. —Agaché la cabeza.

—No tengo la culpa de no estar vestido.

—Claro mi pequeño.

—Soy más alto que tú.

—Es un decir Bill, quería preguntarte algo, algo que estoy muy curioso, espero y me digas la verdad o me sepas explicar que no lo entiendo, aún no lo llego a comprender. —Acarició mi rostro y lo miré muy curioso.

—¿Y eso qué será?

—Pues… ¿Desde cuándo tú sientes algo por mí? Me refiero a este sentimiento, ya sabes, lo que compartimos ahora en cierta forma. —Me quedé pensando.

—Bueno, prácticamente desde que llegué aquí.

—¿Desde el primer día?

—El segundo día… ¿Recuerdas cuando vi al pollo muerto? Pues ese día tú entraste a nuestra habitación y besaste mi mejilla. —Me mordí el labio al recordar eso—. Me pareció un lindo gesto de tu parte, me gustaste.

—¿Sólo por eso?

—Sí, oh, no lo sé, supongo que traté de reprimirlo…

—Antes, cuando estábamos en Hamburgo si yo te hubiese besado en la mejilla ¿te hubiera gustado como algo más que un hermano? —Me puse a pensar, ahí en el agua. Mentalmente visualicé mi habitación de mi casa, allá en la ciudad, yo recostado en mi cama triste después de haber visto alguna sangre por ahí y Tom entrando a mi habitación y dándome un beso en la mejilla consolándome, no entró la imagen en mi mente. Es que lo probable es que ni le hubiese permitido entrar a mi habitación allá. De sólo imaginarme a él asomándose por la puerta de mi pieza le hubiese gritado diciéndole “¡Busca una vida, no vengas a joder aquí!”, lanzándole peluches y si me hubiese besado lo hubiese tomado como una ofensa, pues él allá era de molestar porque usaba maquillaje, me decía “nena, princesita” y eso me desagradaba totalmente pues yo soy un chico sea como sea mi look, detestaba que mi hermano me llamase así sólo para molestarme. Él era como otro allá, o talvez era lo que yo creía que él era.

Hasta que llegamos aquí.

—Si me hubieras besado… yo te hubiera rechazado allá, estoy seguro de eso. —El me miró extrañado y no pude interpretar su mirada.

—Bill.

—¿Si?

—¿Crees en hechizos o maldiciones? —Lo miré sorprendido, pero fue la pregunta más sincera que él me hizo,. Nunca antes vi aquel temor en sus ojos… nunca antes me sentí como si viviera una irrealidad, y tuve el mismo miedo que él.

Yo quería que esto sea real.

Real o no real lo que tienen... el escuchar sobre mitos cambiará un poco la forma de ver su pequeña relación~
Comentarios, sugerencias y críticas son bienvenidas, gracias por leer~

7 comentarios:

  1. sdfghjklñlkjhg me encanta este fic, en realidad me gustan todos tus fic's, este ya me lo he leido muchas veces. in saludito de Alemania

    liebe größer

    Ich kann nicht lieben <3

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    1. soy la primera! :D que emoción =') nunca me había pasado jijij

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    2. hallo<3 *-* muchas gracias :3 por releer<3 y comentar primero *-*

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  2. Hallo
    .___________________. NOOOOOOOOOOOOOO!!!
    Yo estoy de acuerdo con Bill, Yo quiero que eso sea real u_u
    y ahora solo de imaginármelo de que eso que sienten, sea algo solo por un hechizo o maldición :c me pone triste buuu!
    Pero Ojala que ellos estando en Hamburgo Se quieran :DD
    No se ._. pero ayer estaba pensando T_T actualiza Vacaciones, Pink Por favor!, te lo iba a decir pero mejor no, Por que podias estar ocupada, y ahora que desperté, entre al Blog! y aquí esta :DD aquí esta el capitulo *-* Graciiias, Por actualizar c:
    De verdad que me gusta muchísimo este fic :D y Ya empieza el Misterio *www* Espero actualices pronto (claro cuando tengas tiempo)

    Cuidate, Besos <3
    Zuii.

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    1. Hallo<3
      sí u_u ellos creen eso... ¿será verdad? XD veremos....
      espero actualizar prontooo
      besos *-*<3

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  3. vaya que la leyenda urbana los dejo pensando ambos,
    espero que lo que sea que tienen si sea real, aunque hay que admitir que el estar en un lugar casi abandonado de la gracia de dios, si ha influido mucho en ambos.

    espero el proximo, saludos C:

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    1. hallo<3 sí x_x
      cuando algo coincide con un o es fácil atribuirselo o tomárselo personal, quizá es eso, veremos
      besos *-*

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