Una esperanza - 8

Hola a todos *-* aquí otro pequeño capítulo de este fic, espero les guste~ y pronto subiré lo que sigue pues ya lo tengo listo. Saludos *-*~

Harry era buscado en el baño por el auxiliar. 

Ya antes había vivido una situación parecida. Alguien lo agredía, la gente se aglomeraba, se burlaban y él terminaba en algún rincón lejos de todos, tratando de reponerse; seguido, alguien de la escuela lo buscaba para que diera explicación, reportara el problema, pero justamente eso empeoraba las cosas. Siempre era así, como un ciclo. 

La cabeza le dolía y es que todo había dado un vuelco tan precipitado. Primero la clase de matemática, la preocupación por Louis, la salida arriesgada en su búsqueda, los golpes de Louis y luego… el inesperado beso, tan fugaz pero significativo primer beso que no podía olvidar, la negociación con el profesor y el caminar en las nubes por varios minutos, observar a Louis hablar con sus amigos y después justificarlo cuando se estaba acercando, no sospechar nada malo, y luego, sin poder reaccionar, recibir todo el vaso de jugo de piña en su cabeza. Casi no recordaba lo que seguía, eran risas, burlas, la reacción de sus amigos Will y Tom, quienes se pararon de la mesa y alejaron a Louis, algo confundido, luego Liam y Niall se acercaron a defender a Louis y seguido, todos los estudiantes se aglomeraron gritando “pelea” hasta ser dispersados por el auxiliar mientras Harry corría hacia algún baño.

Se había encerrado en uno de los baños luego de mojarse todo el cabello en el lavado. 

Aun respiraba agitado y escuchó mencionar su apellido un montón de veces.

—Joven Styles, salga ahora mismo. —Harry frunció el ceño y suspirando prolongado, se arregló un poco el cabello y decidió dar la cara al mundo.

Pasó lo típico de siempre, lo llevaron a la dirección, le hicieron un montón de preguntas y luego vio cómo el auxiliar redactaba una citación para su mamá.

—No es necesario, no tiene por qué hacer esto —se quejó Harry.

—No me explicas por qué estás así de desalineado y el golpe en el labio, tampoco por qué causaste tanto alboroto en el comedor, ¿qué quieres que haga? Debo tomar medidas, Harry. —El auxiliar lo miró fijo a los ojos—. Dime una cosa, ¿quiénes son los alumnos que te molestan? —Ahí iba otra vez esa misma pregunta—. No es primera vez que vienes a mi despacho en estas condiciones. —Harry evitó verlo a los ojos, sabía que era como meterse en problemas si delataba a Liam o a Louis, así que se cruzó de brazos optando por el silencio y el auxiliar prosiguió con la citación—. Sabes que tenemos un despacho de psicología donde puedes pedir consejo… —trató de verlo a los ojos pero Harry se negaba. —Ten. —Le dio la citación—. Quiero hablar con tu padre o madre. 

Harry terminó por salir de ahí y regresó al baño para tratar de acomodar un poco su mal aspecto. Ya no había estudiantes, todos estaban en clases nuevamente. Caminó hacia su casillero en busca de otra camisa y algo de gel para su cabello.

Regresó al baño y miró su imagen en el espejo. Se decepcionó un poco, su labio aún estaba un poco hinchado, tenía unas horribles ojeras por haber llorado al momento de huir al baño, pero se miró serio, con el ceño fruncido, sabía que debía ser fuerte y enfrentar a todos. 

Nada de ilusionarse.

Lo que había pasado había sido suficiente como para que Harry entendiera que Louis era igual que Liam, y no cambiaría. Harry tenía dignidad, debía pasar de Louis por su bien.

No más.

Regresó al aula, tuvo que pedir disculpas al profesor de Literatura y entrar tratando de no ver las muchas miradas y burlas que hacían sobre él.

—¿Estás bien? —preguntó Will, sentado a un lado de su carpeta. Harry lo vio y le sonrió apenas asintiendo.

—¿Todo bien? —miró a su otro lado y Tom le sonreía, le extendía un libro de la clase y Harry asintió tomando el libro.

No quería mirar hacia Louis. No más de esas miradas fugaces. Todo estaba claro.

Suspiró muchas veces y trató de concentrarse en la clase. Él siempre había sido un alumno sobresaliente aunque no se sentara adelante, pero sus notas eran una de las más altas del salón. Debía mantenerse así, era su orgullo a pesar de todo. 

Por su lado, Louis cargaba con un sentimiento de culpa que no le dejaba concentrarse. Liam y Niall lo habían perdonado y ahora le bromeaban de cualquier cosa entre ellas de Harry.

—¿Lo viste? —Reía Liam—. Lo dejaste re mal, así se hace. 

—Sí —sonreía Louis, pero no estaba tranquilo. Sabía que había sido muy injusto.

A la hora de salida, Louis estaba aliviado de poder irse tranquilo junto a Liam y Niall, nada malo le pasaría por haberse atrevido a dañar a Harry.

—¿Seguro que estás bien? —preguntó Will caminado junto a Harry. Los tres habían esperado un poco a que el resto de alumnos se dispersara. Harry lo miró y trató de sonreír.

—Esto no está bien —dijo Tom mostrando su indignación—. Es hora de hacer algo. Intenté golpearlo pero se acercaron sus amigos. —Harry prestó atención.

—¿Intentaste golpear a Louis?

—Sí, ese maldito no tenía por qué hacerte eso, nada malo le has hecho, todo eran órdenes de Liam. —Harry pensó en eso, pero de todas formas no quería pensar en Louis.

—Es algo que ya pasó, no quiero tocar el tema. —Los demás amigos asintieron y salieron juntos. 

Al llegar a casa, su mamá dio el grito al cielo al verlo en ese estado.

—… ya dije, mamá, me caí en el comedor, el jugo de piña cayó sobre mí y me golpeé el labio en una silla. Eso es todo, pero el auxiliar no me cree, así que debes ir a hablar con él —dijo subiendo las escaleras. Necesitaba una ducha y dormir un poco. Le dolía todo el cuerpo de la tensión sufrida.

Cerraba los ojos mientras en agua caía en su rostro y solo podía imaginar el extraño beso. Lo hizo tantas veces hasta negar el hecho y decirse a sí mismo de que no había sido un beso. “Me quiso hacer daño, eso fue, él vio mi herida en el labio y quiso morderla solo para provocarme más dolor… él no me besó”, sacó esa conclusión para justificar todo lo demás que había pasado. 

Se puso un pijama suelto color gris y optó por dormir un poco.

Abajo, su mamá se alistaba para salir con un nuevo pretendiente, no le diría nada a su hijo, así que no quiso tocarle la puerta y ver qué estaba haciendo.

Harry no había puesto la alarma, tanto fue su sueño que quedó dormido horas, casi toda la tarde y a eso de las seis y media, su mamá se ponía los tacones para irse. Estaba algo nerviosa ya que si Harry la veía así de hermosa, de seguro le cuestionaría muchas cosas, pero ella era muy joven y hacía cinco años se había separado del padre de Harry, merecía rehacer su vida.

Se puso una bufanda e hizo una nota para Harry la cual dejó en la mesa del comedor.

“Hijo, la cena está servida sobre el microondas. Saldré con amigas, regreso pronto, no me esperes”, eso nada más decía.

Al momento de salir se encontró con el compañero de Harry, el mismo que el día anterior había venido a casa.

—Señora, buenas tardes, ¿estará Harry? —dijo nervioso, con una sonrisa en sus labios. La señora Anne se incomodó un poco porque eso era entrar a casa y avisar a su hijo que su amigo había llegado, pero se le ocurrió otra cosa.

—Sí, verás, debo irme ya, pero él está en su habitación. Subes las escaleras y llamas a su puerta —explicó con una sonrisa y Louis por un momento se quedó embelesado de la belleza de la mamá de Harry, sabía que Harry tenía un parecido fuerte con ella.

—Gracias —dijo aceptando entrar.

Suspiró antes de subir las escaleras y luego la señora Anne cerró la puerta principal. Louis subió hasta estar frente a la habitación de Harry no sabía cómo éste iba a reaccionar por su visita. Pero era la culpa quien lo obligó a hacer lo que estaba haciendo.

Se reivindicó... ¿Cómo reaccionará Harry cuando lo vea? Pronto lo sabremos. Contesto cada comentario *-* no olviden leerlos y espero comenten esto~ Gracias!!