Póster - 28

Siguiendo con las actualizaciones, un cachito de póster :D

Tom se sentó en la cama con Bill a su lado. Después de un ataque de risa se sentía cansado, además de que no habían dormido nada y ya casi amanecía. 

—No te lo daré, ya te di mis explicaciones. 

—Eres egoísta, Tom. ¡Egoísta! 

—No importa cuánto chilles, no te lo daré. Necesito decirle a Bill un par de cosas. —Bill le codeó con fuerza. 

—Eres tan estúpido, ¡soy Bill! Y si aparezco aquí ese no soy yo, es otro. Yo no permitiría que me marcaras el cuello así y mucho menos daría problemas a mi disquera ni a Georg. —Se quedó pensativo y se cruzó de brazos—. Aún no sé cómo pasa, creo que cuando intento dormir siento algo extraño y luego al despertar me dicen que me ausenté… Aún no entiendo porqué todo esto comenzó. —Se llevó las manos a la cabeza—. Estoy perdido y ¡tú no quieres cooperar! 

—Tampoco tengo respuestas y no, no cooperaré, ese póster es solo mío, lo compré con tres euros. Me pertenece. 

—Arruinas mi vida —dijo sin mirarlo. Los cabellos fueron hacia su rostro como una cortina para no dejarse ver—. Préstame un teléfono. —Tom suspiró y le tocó el hombro con algo de temor a lo que Bill se removió en rechazo a su tacto. 

—Está bien. —Se puso en pie y buscó su celular dándoselo. Bill lo tomó y marcó un número. Tom se sentó a su lado mirándolo, tratando de ver sus facciones cosa que no podía, Bill no quería y se puso en pie dándole la espalda. 

—Aló… sí, soy yo —habló bajito—. ¡Que sí, joder! —gritó—. Necesito que mandes un auto por mí, estoy en esa casa… no sé, no tengo idea de cómo pasa, pero esto no terminará, necesito regresar a casa, quiero descansar… ¡No preguntes más! Georg, solo haz lo que te pido, ¡que no preguntes! Aishh… —Y colgó. Le tiró el celular en la cama y lo encaró—. Me darás ese póster ahora mismo. —Tom se puso en pie y abrió la puerta de su habitación. Bill buscó alguna polera para cubrirse. 

El de rastas pensó en ese momento. Quizá si le daba el póster Bill sería succionado y podría esperar al otro Bill, así que sonrió de lado ante esa expectativa, aunque habían riesgos que debía decírselo. 

—De acuerdo. Me convenciste. Te daré tu póster, pero antes te advertiré que no es seguro que lo destruyas, no querrás averiguar qué pasa, ¿no? Imagina que te asfixiaste cuando solo estaba enrollado y no es la primera vez que pasó, ya antes Bill, el Bill al que quiero le había pasado eso. —Bill achinó los ojos. 

—¿Me quieres? ¡Cómo osas decirme eso! Trae acá ese póster. —Tom apretó los puños y salió de ahí. 

—¡De acuerdo! —Tenía temor de arriesgarlo todo. Arriesgar la posibilidad de no ver al otro Bill. Su corazón latía temeroso, aún así cedió ante la propuesta de Bill. 

Fue al almacén y sacó el póster, regresó a la habitación y se lo dio. —Ahí tienes… —Lo lanzó a sus pies. 

Bill tembló un poco al verlo ahí, vacío, esperando por él. Lo alzó y miró por todos lados. 

—¿Este póster? Éste póster… —dijo un poco sorprendido y luego miró a Tom—. Este póster no debió salir, o sea, es extraño, no mandé a sacar esta edición de fotos, ¡lo dejé claro, maldición! —Arrugó el póster y luego lo soltó rápidamente porque extrañamente le electrocutó las manos—. ¡Ahh! Está maldito, aléjalo de mí. —Lo pateó y Tom lo recogió para abrazarlo. 

—Te lo dije, es como si tuviera vida. —Tom lo acariciaba como si fuese un bebé, Bill se le quedó mirando por un momento recordando algo. 

—Ése póster… 

—¿Qué tiene? Se ve que es único, no me arrepiento de haberlo adquirido. —Vio como Bill se crispaba recordando algo. 

—Ése póster… ¡Creo saber por qué pasó esto! 

Había hallado la aparente razón.

Al fin se sabrá la razón del misterio del póster >:3 pronto...