Póster - 52

Hola a todos *-* les dejo un pedacito de fic~ disfrútento y tengan buen fin de semana, oh yeah ~*-*~

Tom no tenía una respuesta, seguía observando el rostro de Bill, sus ojos específicamente para ver si bromeaba, mentía o buscaba alguna cosa de él, pero al no notar nada extraño solo tragó saliva y abrió la boca para hablar saliendo un chillido agudo y luego tosió.

—Yo… —tosió otra vez y eso para Bill era un rechazo. Tantas personas en el mundo le hubieran dicho un sí de inmediato, él era deseable, ¿cómo Tom no notaba eso? Se suponía que era su fanático. Bill se angustió y dejó de verlo a los ojos, sentía vergüenza y rechazo—. Bill, qué cosas dices…

—Ya, no digas nada. —Intentó levantarse de ahí, pero Tom lo tomó del brazo deteniéndolo y Bill lo miró.

—¿Por qué? Lo haré si me dices un por qué de tu petición. —Bill abrió la boca buscando inventar algo, no quería decirle la verdad, que era para probar si lo amaba y así solucionar el problema principal.

—Por… porque me gustas.

—¿Y Georg? —Esa pregunta fue como un balde de agua fría, ¿qué estaba a punto de hacer? Sacudió la cabeza y lo miró.

—Olvídalo Tom, olvida lo que dije.

—No te rechazo —dijo directamente aun tomando su mano—. En serio, no puedo, no sabes las ganas que tengo de tocarte en estos momentos, sé que si lo hago no pararé y… terminaré haciéndote el amor de alguna manera, pero las cosas no son así de fáciles, al menos para mí… sé que no me quieres, Bill.

—¿Tú sí? —Miró con esperanza.

—Yo no puedo… —Su rostro decayó—. No puedo enamorarme de alguien imposible.

—¿Imposible?

—¿Crees que no me doy cuenta? Tú estás con Georg porque él es tu igual, ambos son famosos, él comprende tu mundo, tú no podrás quererme porque no tengo nada que darte, solo estás aquí a mi lado por ese póster, solo tengo que ver en todo esto porque lo compré, nada más que eso, por ser el dueño. —Bill lo miró serio entendiendo su punto, él no quería revelarle la condición para que el hechizo desapareciera, solo le importaba enamorar a Tom pero más allá de eso él no lo había pensando.

—Creo que exageras…

—¿Exagero? Te soy sincero.

—Exageras al minimizarte, al pensar que sólo estoy contigo por el póster nada más… No ves más allá de eso, no ves mis… —dudó al decirlo— mis sentimientos. —Tom abrió un poco más los ojos, ¿le hablaba de sentimientos? Él no los sentía.

—¿Sentimientos? ¿Qué sentimientos? Tú tramas algo y no quiero caer en tus encantos así, eso no quiere decir que no te desee, solo no confío. —Bill abrió la boca sorprendido, Tom era astuto, casi como él, eso le incomodó.

Se soltó de su agarre buscando su teléfono para luego encerrarse en el baño. Tom se quedó en la cama y se recostó ahí sobándose los ojos un tanto molesto, le había costado rechazarlo… La tentación era mucha y ahora su mente era inundaba de Bill en diferentes formas cerca de su cuerpo, besando a Bill, haciéndolo suyo; no sabía hasta cuando podía resistirse.

En el baño, Bill prefirió aislarse de todo, qué más daba, su plan no funcionaría debía pensar en regresar. Miró su celular, había mensajes nuevos, temió verlos pero al final debía hacerles frente.

«Bill, estoy preocupado por ti, ¿por qué no llamas?». Era Georg con su natural insistencia, Bill suspiró y leyó otro.

«Si no me llamas pensaré que quieres terminar esto, sé que tramas algo». Bill se angustió un poco, ese mensaje había llegado hace horas, así que llamó.

—¡Aló, Bill! —contestó Georg emocionado.

—Hola…

—¿Dónde estás, por qué no llamas, qué pasa contigo? Me tienes preocupado, no creí el video que pusiste en tu página, estás tramando algo… —seguía hablándole y Bill solo quería sentirse querido, por algo Georg era su novio.

—¿Me quieres?

—¿Qué dices? ¿Qué pasa contigo?

—Quiero saber la verdad, ¿me amas? —Hubo un silencio que le desesperó.

—Claro, sí —sonó vacío—. No veo a qué viene todo, ¿dónde estás?

—¿Serías capaz de venir por mí así esté en el infierno? —Otro silencio y Georg se rió en la línea.

—¡Ya sé, pequeña diva! Es una de esas bromas para después burlarte de mí por largas horas, ¿verdad? Lo grabarás y luego lo subirás en un sitio web para miles de personas se burlen de mí —Rió Georg conociendo de lo que Bill es capaz de hacer.

—No —dijo serio y la risa se detuvo en la línea—. Te soy franco, ¿serías capaz? —Georg dudó mucho, pero no quería sonar así.

—Soy capaz, por ti, Bill, por ti —Georg repetía para creérselo él mismo.

—Pues entonces ven. Estoy en las Maldivas, como hace dos años, en donde todo empezó.

—¡¿Qué?! Pero qué haces allá, por qué…

—Ya sabes cómo llegar, ya sabes en qué isla me gusta estar. Nos vemos. —Y le colgó.

Él no sabía por qué hacía todo eso.

Simplemente necesitaba de alguien que le quisiera, irónico para él teniendo el mundo a sus pies, aparentemente.

 Irá Georg o no irá, es la gran pregunta >:D pronto actualizaré, no olviden comentar *-*