lunes, 22 de octubre de 2012

Mejor Amiga - IV

Hola a todos *-* les traigo este capítulo especial el cual es uno de los que más me gustó escribir. Romea fue por su Julieto XDDD Disfrútenlo. 

Bill entró rápidamente a su habitación y buscó algo con qué ayudarla a subir. Su corazón latía muy rápido y casi podía sentir sus mejillas calientes, Annie estaba ahí, había venido para verlo, y quizá había una esperanza… 

Sacó las sábanas de su cama y tan rápido como pudo, volvió a la ventana. Annie estaba trepando su pared, tan arriesgada ella. Su camisón de pijama y su cabello era movido por el viento, se veía como un ángel de preciosa. 

—Aquí tienes. —Tiró parte de la sábana y ella lo tomó, ahora Bill con todas sus fuerzas, jaló la sábana hasta que Annie fue alzada en ella y pudo llegar al borde de la ventana en donde Bill la recibió y tomándola de la cintura ayudó a meterla adentro. 

—Ahh… —Suspiró emocionada—. Al fin… —Ahora miraba a los ojos de Bill que brillaban algo acuosos y la luna iluminaba su rostro—. Debía verte, Bella. 

—Gracias por estar aquí, yo creí… creí que no querías verme, en verdad creí eso. —Ella no dejaba de verlo a los ojos y sólo pudo acercarse para abrazarlo. 

—Lo lamento Bella, soy muy cobarde y… —decidió callar, ella no quería ser la que confundiera a la otra. Sólo quería estar ahí y sentir a su amiga cerca, lo confortable que eran sus brazos y saber que no la perdería nunca. 

Bill por su parte, estaba sorprendido por aquella reacción de Annie. Se dejaba abrazar y posó ambas manos en la cintura pequeña de la mayor y ésta tomó sus manos, sintiéndolas frías. 


—Bella —se animó a decir—, no sé qué pasa conmigo, todo esto es confuso para mí. —Se mordió el labio inferior intentado buscar las palabras adecuadas para arreglar la situación. 

—Para mí también —habló Bill con una voz algo grave, miraba intensamente a los ojos de Annie y luego alzó sus manos para tomar su rostro, y Annie se las tomó por encima aguardando por alguna reacción de parte de Bella—. Te quiero Annie y no como amiga nada más… —Annie abrió los ojos sorprendida, y luego jadeó nerviosa por la cercanía de Bella. 

Ella no había podido dormir aquella noche debido a que le había dicho a su mamá que le dijera a Bella que no quería verla. Así era, se sentía tan mal con respecto a sus sentimientos que lo que menos quería era arruinar la amistad que tenían. Pero si no la veía, arruinaría su amistad de todas maneras, así que se armó de valor para irla a buscar, con la consigna en su mente de que si algo tenía que pasar entre ellas, Annie no se negaría, solo que no pensaba ser ella quien dijera algo. Y justo ahora, Bella se había revelado de esa manera. 

—Me gustas y no sé si eso sea una incomodidad para ti. —Miró fijamente a sus ojos, Annie estaba asustada, pero no se movía, no empujaba a Bill, solo parecía rendirse ante lo que le dijera o hiciera—. Annie… —susurrando su nombre, acortó la distancia y la besó en los labios. 

Annie cerró muy bien los ojos y solo se dejó besar. Estaba decidida que si algo pasara con Bella, ella se dejaría porque también la quería de esa manera. Era un descubrimiento reciente… tan reciente que llegaba a confundirla. 

Los labios de Bill eran muy suaves y cálidos, se movían sobre los de Annie tan cuidadosamente, succionándolos un poco y Annie no pudo evitar agitarse… El corazón de Bill parecía latir tanto y en su vientre empezó a formarse un calor, algo que empezaba a sofocarlo mientras más la besaba. Y Annie, ella apretó ligeramente las manos de Bill que yacían sosteniendo su rostro, las apretó indicándole romper el beso, y así fue. 

Se miraron intensamente, Annie sonrió algo avergonzada, pero Bill suspiraba cada momento que podía sintiéndose flotar en una nube. Quería que fuera así siempre: Annie, él y el firmamento. 

—No sé qué decirte… —Habló Annie agitada—. Pero no me arrepiento de esto… si me besas otra vez, estoy segura que me dejaré. —Bill posó ambas manos en las caderas de ella, y buscó su miraba, Annie sonreía tímida, bastante ruborizada, todo era tan nuevo en ese momento. Bill rió un poco, estaba tan emocionado y no dejaba de suspirar. 

—¿Te dejarías? —Esta vez Annie rió nerviosa y asintió relamiéndose los labios en una insinuación tímida. 

Luego que Bill acortara la distancia, se besaron, y esta vez fue más intenso. Annie pegó más su cuerpo contra el otro, y rodeó su cuello con sus desnudos brazos. Ante ellos la luna grande se imponía en el cielo, y hacía ese beso simplemente especial y único. 

Los labios de Annie se movían impacientes y Bill se dejaba besar, hasta que sintió cómo su sangre recorría su cuerpo, llenándole de calor y cómo su respiración empezaba a hacerse tan agitada, necesitado por aire, rompió aquel beso, pero Annie volvió a besarlo. Aquel último beso era más intenso, primera vez algo así se manifestaba en ambos. 

Movía sus manos un tanto desesperado por la cintura de la chica. Ella cada vez más se pegaba a él moviéndose ansiosa, dejándose besar. 

Bill empezó a sentir tanto calor, y cierta parte de su cuerpo a despertar sin siquiera poder detener ese impulso. Así que se separó muy nervioso de Annie quien estaba agitada mirando a Bella a los ojos. 

—Annie. —Casi desconocía su voz, ella tomó sus manos, pero Bill retrocedió un poco—. No, espera. —Suspiró muy agitado—. Espera… —Ella rió bastante nerviosa y agitada y Bill simplemente quería salir de ahí por un momento. 

Buscó con su miraba distraerse con alguna cosa que no sea Annie ni en el calor que deseaba sentir con ella. Las cosas se habían precipitado un poco, debían hablarlo, y dejar a un lado los besos o… o él no sabría en donde desembocaría todo aquello. Sus pantalones de pijama empezaban a presionarle cierta parte. Decidió sentarse o Annie se daría cuenta. 

Se pasó la mano por sus cabellos desordenados e invitó a Annie a sentarse a su lado en la cama. 

—¿Tienes frío? —preguntó a Annie quien usaba un camisón y tenía los brazos descubiertos y algo fríos por el aire que entraba por la ventana. 

—No. Bueno, un poco. —Bill se le acercó y cogió una pequeña frazada con la que cubrió su espalda, ella la tomó y se cubrió con ella. 

—Annie…no sé qué estés pensando ahora y no sé que será de nosotros —carraspeó—, digo, nosotras, hay… hay cosas que no sabes de mí y… no sé. —prefirió callar, estaba muy nervioso por todo lo que acababa de pasar. 

Annie lo miraba detenidamente. —Quiero saberlo todo, Bella, por algo somos mejores amigas, aunque… —Se mordió el labio esperando que Bella le dijera qué eran exactamente en ese momento. 

—Aunque me gustes como algo más que eso… —dijo él. 

—Sí, me gustas como algo más que amigas. —Bill tomó su mano. 

—¿Cómo no lo supe antes, Annie? —ella rió bajito, luego suspiró. 

—Esto es nuevo, totalmente… es que… —titubeó—. Se supone que no me gustan las chicas —dijo con un tono suave y casi en un susurro pequeño, uno inseguro—. Lo lamento, solo pasó contigo… —Bill no sabía qué decirle, Annie se sentía culpable porque supuestamente él era una chica. 

Se mordió los labios, acallando algo que quería decirle, pero ¿cómo lo haría? Pestañeó nervioso buscando las palabras y Annie al escuchar su respiración y ver en su mirada mucho nerviosismo, intentó pasar del tema. —Bella, no importa eso, quiero que sepas que me importas mucho… —Bill calló ante eso y Annie empezó a entristecerse un poco. 

—¿Aún si crees que soy una chica? —probó preguntando. Annie se sorprendió un poco con esa pregunta. 

—Sé que eres una chica, ambas lo somos, pero eso es secundario, ¿no? —preguntó dudosa. Bill miró hacia el techo de su habitación pensando en todo aquello. Luego tomó una mano de Annie y la miró a los ojos. 

—Eres hermosa Annie, siempre te he querido de esta forma, siempre me has gustado… intento pensar desde cuándo, pero la respuesta sería desde que te vi por primera vez. —Annie no lo podía creer, eso era una gran sorpresa. 

—Siempre te gustaron las chicas… —habló muy ruborizada. 

—Sólo tú… y hace exactamente una hora pensaba en lo desdichada que era mi vida hasta que entraste por esa ventana. —Se acercó más a Annie—. ¿Quieres ser mi novia? —La chica saltó en su sitio, se sorprendió ante eso. 

—¿No-novias? —tenía algo de temor en decir “sí” pero asintió emocionada—. Sí quiero —abrazó a Bella tan fuerte como pudo—. Aunque será difícil porque somos chicas, quiero enfrentar todo contigo… 

En el pueblo de Haverbeck, el tema de personas homosexuales era un completo tabú, y hasta podrían expulsarlos del condado si sabían que eran pareja siendo dos mujeres. Era muy mal visto y condenado. 

—Y… y si no fuera una —susurró en su oído y Annie se separó de él para mirarlo, Bill tragó saliva—. ¿Sería un problema si no fuera una chica? 

—Pe-pero lo somos. 

—Tú sí… 

—¿Qué? —Bill agachó la cabeza, suspirando algo temeroso. 

—Nada… —Pero ella se impacientó. 

—Algo te pasa, puedo presentirlo y quiero saberlo. —Eso era tan difícil. 

—Si fuera un chico Annie, sería mejor para ti, ¿no crees? —Ella se quedó pensando un rato ahí sentada. 

—Quizá sería mejor, quizá no. Lo que me importa es quien eres tú ahora. —Ella se le acercó y besó sus labios, Bill se dejó. 

Dos jóvenes que habían descubierto el amor entre ellos de esa manera, lo único que querían era estar más cerca del otro. Era algo inevitable, pero a la vez peligroso… 

Bill sabía que no podía callar más su secreto con ella, tarde o temprano lo tenía que saber y mientras ella le besaba, Bill sentía como el cuerpo de Annie se recostaba poco a poco sobre el suyo. Tragó saliva, él no quería asustarla con las respuestas naturales de su cuerpo. 

—Annie, espera —jadeó y la puso a su costado, ahora ambos frente a frente en su cama—. Existen cosas… creo que debes saber esto y luego dejaré que pienses si quieres continuar conmigo o no… —Annie no podía imaginar qué le diría, pero lo animó poniendo una mano sobre la mejilla de Bill. 

—confío en ti… deberías confiar en mí, Bella. 

—Y quiero… —Suspiró y Annie lo miraba expectante—. Esto es difícil, Annie, siempre he sido alguien que no soy realmente, simplemente no soy mujer, aunque bueno, sé que parezco una… 

—¿Qué quieres decir? —Annie no podía imaginarse lo que le decía, se apoyó en sus codos y lo miraba fijamente, pestañeando seguido, trataba de entender lo último que le había dicho. Bill por su parte tenía miedo atemorizarla o decepcionarla pero debía soltar todo de una vez. 

—Me llamo Bill en realidad, y nací siendo un chico… es una larga historia. —La cara de Annie era de suma sorpresa, eso que le había dicho sí lo había podido entender a la perfección, su mejor amiga no era una chica, era un chico y hasta su nombre era diferente. 

—¿Bill? —Aquella mención dudosa de su nombre lo emocionó mucho—. ¿Cómo que eres un chico? ¿No me estás bromeando? —Ella aún estaba anonadada y Bill rió un poco. 

—No podría bromear con algo así. —Ella puso una mano sobre su pecho, acariciándolo—. Lamento decirlo ahora, esto es bastante difícil, no tienes idea. 

—¿Por qué no me dijiste antes? ¿Tú madre sabe de esto? —Bill no pudo aguantar la risa, empezaba a relajarse. 

—Mi madre, ella quiere que sea Bella, ella fue la causante de que me criara así, como me conociste siempre. —Annie no decía nada, estaba con los ojos muy abiertos captando aquella nueva información—. ¿Estás bien? Ahora depende de ti si quieres seguir o no… pero tenías que saber esto. —Annie asintió y bajó la mirada pensando… 

—Yo te quiero con todo y tus misterios… humm… Bill, ¿está bien si te llamo así? 

—Totalmente sí, prefiero que me llames Bill, aunque no delante de mi madre o algún otro conocido, por ahora. 

—¿De verdad eres un chico? —Annie rió nerviosa—. Esto es nuevo para mí, no sé ni cómo tratarte ahora… quizá deba alejarme un poco. —Se arrimó lejos de él unos centímetros, pero Bill le sonrió y se acercó tomándole un brazo. 

—¿Por qué te alejas? Sigo siendo el mismo que conoces, o la misma —rió—. Solo que ahora sabes más de mí… Y claro que soy un chico, siempre lo he sido, es más, pienso como un chico y me interesan todas esas cosas —suspiró—. Solo que no puedo hacer mucho… mi madre siempre estaba ahí impulsándome a acercarme a ti para copiar tu forma de ser… que nunca pude porque tú eres completamente chica. 

—Oh, esto es tan raro, tu madre, ella… —frunció el ceño—. Aunque sin ella quizá no seríamos grandes amigas… —carraspeó—. Amigos ahora… 

—¿Amigos? —Annie se ruborizó. 

—Novios… —corrigió y Bill asintió. 

—Si quieres que lo seamos, claro. 

—Yo quiero, Bill. 

Y volvieron a besarse. Esta vez para Annie fue algo diferente, pues era conciente que besaba a un chico ahora, aunque en el fondo, tal como Bill lo había dicho, siempre era su mejor amiga… eso no cambiaría, solo que ahora habían dado un paso más y la verdad estaba descubierta. 

Annie acarició los costados de Bill y percatándose cada vez más la ausencia de caderas, y queriendo tocarlo para conocer más al chico que era, completo. 

—Annie —jadeó Bill en sus labios y tomó sus manos que estaban en su bajo vientre—, sabes lo que puede pasar si me tocas… si pones tus manos ahí… 

—No sé —dijo ella en un susurró, tenía curiosidad. 

—Soy un chico, ya sabes… —Bill se moría de vergüenza, podía adivinar las intenciones de Annie. 

Poco a poco el agarre de Bill sobre las manos de Annie fue disminuyéndose, empezó a soltarla y su respiración a agitarse cada vez más. 

—¿Puedo tocarte? —preguntó Annie absolutamente ruborizada, Bill podía sentir el calor que emanaba de su cuerpo y cómo sus respiraciones se convertían en pequeños jadeos. 

—Puedes, pero… —Se mordió el labio, cerrando los ojos ante un estremecimiento cuando Annie comenzó a descender sus manos. 

—¿Pero? —Bill jadeó y se removió un poco. Annie tenía algo de temor, ¿qué sensaciones podía hacerle sentir? 

Sus manos, por encima del pijama de Bill, dieron con algo muy abultado y tuvo absoluta certeza de que era un chico. Aún no sabiendo cómo acariciarlo, presionó un poco y ocultó su rostro en el cuello de su chico que gimió un poco sorprendido. 

—Bésame Bill —susurró en su oído. 

Bill no podía contestar, tan solo jadeaba sintiendo como toda su temperatura subía, su corazón latía desbocado y todo se hacía placentero, así que la besó y rodeó su cintura, presionándose en ella…

Descubrió la verdad~ *.* ¿qué más creen que pueda pasar? Aún son pequeños u_u veremos.

2 comentarios:

  1. ayy wow! *w* ... de acuerdo ambos inexpertos en eso :/ ... pero entre mas pronto mejor no crees? xDD... bueno yo solo digo ._. .. xD...me encanta! :3 ... ojala y ahora si puedan defender ese amor y salir adelante :) ...sobre todo con la mama de Bill ¬¬'.. Gracias!! ^^...espero el proximo!! ;D...SALUDOS BESOS Y APAPACHOS!! <3

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    1. jijijii sí *-* inexpertos porque son pequeños aún. veremos cómo evoluciona su pequeña relación y lo que puede pasar con la mamá de Bill ;_;
      Besos a ti <333

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